Jeremías 32:36
Y con todo, ahora así dice Jehová Dios de Israel, a esta ciudad, de la cual decís vosotros: Entregada será en mano del rey de Babilonia a espada, a hambre, y a pestilencia:
Jeremías 32:24
He aquí que con arietes han acometido la ciudad para tomarla; y la ciudad va a ser entregada en mano de los caldeos que pelean contra ella, a causa de la espada, y del hambre y de la pestilencia; lo que tú habías dicho, ha sucedido, y he aquí tú lo estás viendo.
Jeremías 32:3
Pues Sedequías rey de Judá lo había apresado, diciendo: ¿Por qué profetizas tú diciendo: Así dice Jehová: He aquí yo entrego esta ciudad en mano del rey de Babilonia, y la tomará,
Isaías 43:24-25
No compraste para mí caña aromática por dinero, ni me saciaste con la grosura de tus sacrificios; antes me abrumaste con tus pecados, me fatigaste con tus maldades.
Isaías 57:17-18
Por la iniquidad de su codicia me enojé y lo herí, escondí mi rostro y me indigné; y él siguió rebelde por el camino de su corazón.
Jeremías 16:12-15
Y vosotros habéis hecho peor que vuestros padres; porque he aquí que vosotros camináis cada uno tras la imaginación de su malvado corazón, no oyéndome a mí.
Jeremías 32:28
Por tanto así dice Jehová: He aquí voy a entregar esta ciudad en mano de los caldeos, y en mano de Nabucodonosor rey de Babilonia, y la tomará:
Ezequiel 36:31-32
Y os acordaréis de vuestros malos caminos, y de vuestras obras que no fueron buenas; y os avergonzaréis de vosotros mismos por vuestras iniquidades, y por vuestras abominaciones.
Oseas 2:14
Pero he aquí, yo la atraeré, y la llevaré al desierto, y hablaré a su corazón.
Romanos 5:20
Y la ley entró para que el pecado abundase; pero cuando el pecado abundó, sobreabundó la gracia;
Efesios 2:3-5
entre los cuales también todos nosotros vivimos en otro tiempo; en la concupiscencia de nuestra carne, haciendo la voluntad de la carne y de los pensamientos, y éramos por naturaleza hijos de ira, lo mismo que los demás.
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido