Jeremías 35:13
Así dijo el SEÑOR de los ejércitos, Dios de Israel: Ve, y di a los varones de Judá, y a los moradores de Jerusalén: ¿Nunca recibiréis castigo escuchando mis palabras? Dijo el SEÑOR.
Jeremías 5:3
Oh SEÑOR, ¿Por ventura no miran tus ojos a la verdad? Los azotaste, y no les dolió; los consumiste, y no quisieron recibir castigo; endurecieron sus rostros más que la piedra, no quisieron tornarse.
Jeremías 32:33
Y me volvieron la cerviz, y no el rostro; y cuando los enseñaba, madrugando y enseñando, no oyeron para recibir castigo;
Isaías 28:9-12
¿A quién se enseñará ciencia, o a quién se hará entender doctrina? A los quitados de la leche. A los destetados de los pechos.
Jeremías 6:8-10
Castiga Jerusalén, para que por ventura no se aparte mi alma de ti, para que por ventura no te torne desierta, tierra no habitada.
Salmos 32:8-9
Te haré entender, y te enseñaré el camino en que andarás; sobre ti fijaré mis ojos.
Proverbios 8:10
Recibid mi castigo, y no plata; y ciencia más que el oro escogido.
Proverbios 19:20
Escucha el consejo, y recibe el castigo, para que seas sabio en tu vejez.
Isaías 42:23
¿Quién de vosotros oirá esto? ¿Advertirá y considerará respecto al porvenir?
Jeremías 9:12
¿Quién es varón sabio que entienda esto? ¿Y a quién habló la boca del SEÑOR, para que pueda declararlo? ¿Por qué causa la tierra ha perecido, ha sido asolada como desierto, que no hay quien pase?
Hebreos 12:25
Mirad que no desechéis al que habla. Porque si no escaparon aquellos que desecharon al que hablaba en la tierra, mucho menos escaparemos nosotros, si desecháramos al que habla desde los cielos.
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido