Job 2:13

Entonces se sentaron en el suelo con él por siete días y siete noches sin que nadie le dijera una palabra, porque veían que {su} dolor era muy grande.

Génesis 50:10

Cuando llegaron hasta la era de Atad, que está al otro lado del Jordán, hicieron allí duelo con una grande y dolorosa lamentación; y {José} guardó siete días de duelo por su padre.

Ezequiel 3:15

Entonces vine a los desterrados de Tel-abib que habitaban junto al río Quebar, y allí donde ellos vivían, estuve sentado siete días, atónito, en medio de ellos.

Génesis 1:5

Y llamó Dios a la luz día, y a las tinieblas llamó noche. Y fue la tarde y fue la mañana: un día.

Génesis 1:8

Y llamó Dios a la expansión cielos. Y fue la tarde y fue la mañana: el segundo día.

Esdras 9:3

Y cuando oí de este asunto, rasgué mi vestido y mi manto, y arranqué pelo de mi cabeza y de mi barba, y me senté atónito.

Nehemías 1:4

Y cuando oí estas palabras, me senté y lloré, e hice duelo {algunos} días, y estuve ayunando y orando delante del Dios del cielo.

Job 4:2

Si alguien osara hablarte, ¿te pondrías impaciente? Pero ¿quién puede abstenerse de hablar?

Salmos 77:4

Has mantenido {abiertos} mis párpados; estoy tan turbado que no puedo hablar.

Isaías 3:26

Sus puertas se lamentarán y estarán de luto; y ella, desolada, se sentará en tierra.

Isaías 47:1

Desciende y siéntate en el polvo, virgen hija de Babilonia. Siéntate en la tierra, sin trono, hija de los caldeos, porque nunca más serás llamada tierna y delicada.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido