Job 27:5

Nunca tal acontezca que yo os justifique; hasta que muera no quitaré de mí mi integridad.

Job 2:9

Entonces su esposa le dijo: ¿Aún retienes tu integridad? Maldice a Dios, y muérete.

Job 13:15

He aquí, aunque Él me matare, en Él esperaré; pero sostendré delante de Él mis caminos.

Deuteronomio 25:1

Cuando hubiere pleito entre algunos, y vinieren a juicio, y los juzgaren, y absolvieren al justo y condenaren al inicuo,

Job 29:14

Me vestía de justicia, y ella me cubría; como manto y diadema era mi justicia.

Job 32:3

Se encendió asimismo en ira contra sus tres amigos, porque no hallaban qué responder, aunque habían condenado a Job.

Job 42:7

Y aconteció que después que habló Jehová estas palabras a Job, Jehová dijo a Elifaz temanita: Mi ira se encendió contra ti y tus dos compañeros; porque no habéis hablado de mí lo recto, como mi siervo Job.

Proverbios 17:15

El que justifica al impío, y el que condena al justo, ambos son igualmente abominación a Jehová.

2 Corintios 1:12

Porque ésta es nuestra gloria; el testimonio de nuestra conciencia, que con simplicidad y sinceridad de Dios, no con sabiduría carnal, sino por la gracia de Dios, nos hemos conducido en el mundo, y más abundantemente con vosotros.

Gálatas 2:11

Pero cuando Pedro vino a Antioquía, le resistí en su cara, porque era de condenar.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)