Job 40:14

Y yo también te confesaré que podrá salvarte tu diestra.

Salmos 44:3

Porque no se apoderaron de la tierra por su espada, ni su brazo los libró; sino tu diestra, y tu brazo, y la luz de tu rostro, porque te complaciste en ellos.

Salmos 44:6

Porque no confiaré en mi arco, ni mi espada me salvará.

Isaías 40:29

Él da fortaleza al cansado, y multiplica las fuerzas al que no tiene ningunas.

Romanos 5:6

Porque Cristo, cuando aún éramos débiles, a su tiempo murió por los impíos.

Efesios 2:4-9

Pero Dios, que es rico en misericordia, por su gran amor con que nos amó,

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)