Job 41:24

Su corazón es duro como piedra, duro como piedra de molino.

Isaías 48:4

Por cuanto sé que eres obstinado, que tendón de hierro es tu cerviz y de bronce tu frente,

Jeremías 5:3

Oh, SEÑOR, ¿no {buscan} tus ojos la verdad? Tú los heriste, mas no les dolió; tú los consumiste, mas ellos rehusaron recibir corrección. Endurecieron sus rostros más que la roca, rehusaron arrepentirse.

Zacarías 7:12

Y endurecieron sus corazones como el diamante para no oír la ley ni las palabras que el SEÑOR de los ejércitos había enviado por su Espíritu, por medio de los antiguos profetas; vino, pues, gran enojo de parte del SEÑOR de los ejércitos.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido