Josué 23:11

Por tanto, cuidad mucho por vuestras almas, que améis a Jehová vuestro Dios.

Josué 22:5

Solamente que con diligencia cuidéis de poner por obra el mandamiento y la ley, que Moisés siervo de Jehová os intimó: que améis a Jehová vuestro Dios, y andéis en todos sus caminos; que guardéis sus mandamientos, y le sigáis, y le sirváis de todo vuestro corazón y de toda vuestra alma.

Éxodo 20:6

Y que hago misericordia a millares de los que me aman y guardan mis mandamientos.

Deuteronomio 4:9

Por tanto, guárdate, y guarda tu alma con diligencia, que no te olvides de las cosas que tus ojos han visto, y no se aparten de tu corazón todos los días de tu vida; antes bien, las enseñarás a tus hijos, y a los hijos de tus hijos.

Deuteronomio 6:5-12

Y amarás a Jehová tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con todas tus fuerzas.

Proverbios 4:23

Sobre toda cosa guardada guarda tu corazón; porque de él mana la vida.

Lucas 21:34

Y mirad por vosotros mismos, que vuestros corazones no sean cargados de glotonería y embriaguez y de los afanes de esta vida, y venga de repente sobre vosotros aquel día.

Romanos 8:28

Y sabemos que todas las cosas ayudan a bien, a los que aman a Dios, a los que conforme a su propósito son llamados.

1 Corintios 8:3

Pero si alguno ama a Dios, el tal es conocido de Él.

1 Corintios 16:22

El que no amare al Señor Jesucristo, sea anatema. Maranata.

Efesios 5:15

Mirad, pues, que andéis con diligencia; no como necios, sino como sabios,

Hebreos 12:15

Mirando bien que ninguno se aparte de la gracia de Dios; no sea que brotando alguna raíz de amargura, os perturbe, y por ella muchos sean contaminados;

Judas 1:20-21

Pero vosotros, amados, edificándoos sobre vuestra santísima fe, orando en el Espíritu Santo,

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)