Juan 5:30

No puedo yo hacer nada de mí mismo; como oigo, juzgo; y mi juicio es justo; porque no busco mi voluntad, sino la voluntad del Padre que me envió.

Mateo 26:39

Y yendo un poco más adelante, se postró sobre su rostro, y oró diciendo: Padre mío, si es posible, que pase de mí esta copa, pero no se haga mi voluntad, sino la tuya.

Juan 4:34

Jesús les dijo: Mi comida es que haga la voluntad del que me envió, y que acabe su obra.

Juan 5:19

Respondió entonces Jesús, y les dijo: De cierto, de cierto os digo: No puede el Hijo hacer nada de sí mismo, sino lo que ve hacer al Padre; porque todo lo que Él hace, eso también hace el Hijo igualmente.

Juan 6:38

Porque he descendido del cielo, no para hacer mi voluntad, sino la voluntad del que me envió.

Juan 8:28

Entonces Jesús les dijo: Cuando hayáis levantado al Hijo del Hombre, entonces entenderéis que yo soy, y que nada hago de mí mismo; sino que como mi Padre me enseñó, así hablo estas cosas.

Juan 14:10

¿No crees que yo soy en el Padre, y el Padre en mí? Las palabras que yo os hablo, no las hablo de mí mismo; sino que el Padre que mora en mí, Él hace las obras.

Salmos 40:7-8

Entonces dije: He aquí, vengo; en el rollo del libro está escrito de mí:

Juan 8:15-16

Vosotros juzgáis según la carne; yo no juzgo a nadie.

Romanos 15:3

Porque ni aun Cristo se agradó a sí mismo; antes bien, como está escrito; Los vituperios de los que te vituperaban, cayeron sobre mí.

Génesis 18:25

Lejos de ti el hacer tal cosa, que hagas morir al justo con el impío y que sea el justo tratado como el impío; nunca tal hagas. El Juez de toda la tierra, ¿no ha de hacer lo que es justo?

Salmos 96:13

Porque Él viene, porque Él viene a juzgar la tierra. Juzgará al mundo con justicia, y a los pueblos con su verdad.

Isaías 11:3-4

Y le hará entender diligente en el temor de Jehová. No juzgará según la vista de sus ojos, ni argüirá por lo que oyeren sus oídos;

Oseas 10:7-10

De Samaria fue cortado su rey como la espuma sobre la superficie de las aguas.

Juan 8:42

Jesús entonces les dijo: Si Dios fuese vuestro Padre, ciertamente me amaríais; porque yo de Dios he salido, y he venido; pues no he venido de mí mismo, sino que Él me envió.

Juan 8:50

Y yo no busco mi gloria, hay quien la busca, y juzga.

Juan 17:4

Yo te he glorificado en la tierra; he acabado la obra que me diste que hiciese.

Juan 18:11

Entonces Jesús dijo a Pedro: Mete tu espada en la vaina; la copa que mi Padre me ha dado, ¿no la he de beber?

Romanos 2:2

Pero sabemos que el juicio de Dios contra los que hacen tales cosas es según verdad.

Romanos 2:5

Mas por tu dureza, y tu corazón no arrepentido, atesoras ira para ti mismo, para el día de la ira y de la manifestación del justo juicio de Dios,

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)