Juan 6:56

El que come mi carne y bebe mi sangre, en mí permanece, y yo en él.

Juan 15:4-5

Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto de sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí.

1 Juan 3:24

Y el que guarda sus mandamientos, permanece en Él, y Él en él. Y en esto sabemos que Él permanece en nosotros, por el Espíritu que nos ha dado.

1 Juan 4:15-16

Todo aquel que confiese que Jesús es el Hijo de Dios, Dios permanece en él, y él en Dios.

Salmos 90:1

«Oración de Moisés varón de Dios» Señor, tú nos has sido refugio de generación en generación.

Salmos 91:1

El que habita al abrigo del Altísimo, morará bajo la sombra del Omnipotente.

Salmos 91:9

Porque has puesto a Jehová, que es mi refugio, al Altísimo por tu habitación,

Lamentaciones 3:24

Mi porción es Jehová, dijo mi alma; por tanto en Él esperaré.

Juan 14:20

En aquel día vosotros conoceréis que yo estoy en mi Padre, y vosotros en mí, y yo en vosotros.

Juan 14:23

Respondió Jesús y le dijo: Si alguno me ama, mis palabras guardará; y mi Padre le amará, y vendremos a él, y haremos con él morada.

Juan 17:21-23

Para que todos sean uno; como tú, oh Padre, en mí, y yo en ti, que también ellos sean uno en nosotros; para que el mundo crea que tú me enviaste.

2 Corintios 6:16

¿Y qué concierto tiene el templo de Dios con los ídolos? Porque vosotros sois el templo del Dios viviente, como Dios dijo: Habitaré y andaré entre ellos; y seré su Dios, y ellos serán mi pueblo.

Efesios 3:17

que habite Cristo por la fe en vuestros corazones; para que, arraigados y fundados en amor,

1 Juan 4:12

A Dios nadie le vio jamás. Si nos amamos unos a otros, Dios permanece en nosotros, y su amor se perfecciona en nosotros.

Apocalipsis 3:20

He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)