Jueces 14:6
Y el Espíritu del SEÑOR vino sobre él con gran poder, y lo despedazó como se despedaza un cabrito, aunque no tenía nada en su mano; pero no contó a su padre ni a su madre lo que había hecho.
Jueces 3:10
Y vino sobre él el Espíritu del SEÑOR, y juzgó a Israel. Cuando salió a la guerra, el SEÑOR entregó en su mano a Cusán-risataim, rey de Mesopotamia, y su poder prevaleció sobre Cusán-risataim.
Jueces 13:25
Y el Espíritu del SEÑOR comenzó a manifestarse en él en Mahané-dan, entre Zora y Estaol.
1 Samuel 11:6
Y el Espíritu de Dios vino con poder sobre Saúl al escuchar estas palabras, y Saúl se enojó grandemente.
Jueces 11:29
Y el Espíritu del SEÑOR vino sobre Jefté, y pasó por Galaad y Manasés; luego pasó por Mizpa de Galaad, y de Mizpa de Galaad fue adonde {estaban} los hijos de Amón.
Jueces 15:8
Y sin piedad los hirió con gran mortandad; y descendió y habitó en la hendidura de la peña de Etam.
Jueces 15:15
Y halló una quijada de asno fresca {aún,} y extendiendo su mano, la tomó y mató a mil hombres con ella.
Jueces 16:30
Y dijo Sansón: ¡Muera yo con los filisteos! Y se inclinó con todas sus fuerzas y el edificio se derrumbó sobre los príncipes y sobre todo el pueblo que {estaba} en él. Así que los que mató al morir fueron más que los que había matado durante su vida.
1 Samuel 17:34-37
Pero David respondió a Saúl: Tu siervo apacentaba las ovejas de su padre, y cuando un león o un oso venía y se llevaba un cordero del rebaño,
1 Samuel 17:46
El SEÑOR te entregará hoy en mis manos, y yo te derribaré y te cortaré la cabeza. Y daré hoy los cadáveres del ejército de los filisteos a las aves del cielo y a las fieras de la tierra, para que toda la tierra sepa que hay Dios en Israel,
Isaías 42:2
No clamará ni alzará {su voz,} ni hará oír su voz en la calle.
Zacarías 4:6
Continuó él, y me dijo: Esta es la palabra del SEÑOR a Zorobabel: ``No por el poder ni por la fuerza, sino por mi Espíritu" --dice el SEÑOR de los ejércitos.
Mateo 11:29
1 Juan 3:8
El que practica el pecado es del diablo, porque el diablo ha pecado desde el principio. El Hijo de Dios se manifestó con este propósito: para destruir las obras del diablo.
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido