Lamentaciones 2:10
En tierra están sentados, en silencio, los ancianos de la hija de Sion. Han echado polvo sobre sus cabezas, se han ceñido de cilicio. Han inclinado a tierra sus cabezas las vírgenes de Jerusalén.
Isaías 3:26
Sus puertas se lamentarán y estarán de luto; y ella, desolada, se sentará en tierra.
Job 2:12-13
Y cuando alzaron los ojos desde lejos y no lo reconocieron, levantaron sus voces y lloraron. Cada uno de ellos rasgó su manto y esparcieron polvo hacia el cielo sobre sus cabezas.
Isaías 15:3
En sus calles se han ceñido de cilicio; en sus terrados y en sus plazas todos gimen, deshechos en lágrimas.
Josué 7:6
Entonces Josué rasgó sus vestidos y postró su rostro en tierra delante del arca del SEÑOR hasta el anochecer, él y los ancianos de Israel; y echaron polvo sobre sus cabezas.
Isaías 47:1
Desciende y siéntate en el polvo, virgen hija de Babilonia. Siéntate en la tierra, sin trono, hija de los caldeos, porque nunca más serás llamada tierna y delicada.
Lamentaciones 1:1
¿Cómo yace solitaria la ciudad de tanta gente! Se ha vuelto como una viuda la grande entre las naciones; la princesa entre las provincias se ha convertido en tributaria.
Lamentaciones 1:4
Los caminos de Sion están de luto, porque nadie viene a las fiestas solemnes. Todas sus puertas están desoladas, gimen sus sacerdotes, sus vírgenes están afligidas, y ella misma está amargada.
Lamentaciones 3:28
Que se siente solo y en silencio ya que El se {lo} ha impuesto;
Ezequiel 7:18
``Se ceñirán de cilicio y los cubrirá el terror; {habrá} en todos los rostros vergüenza y todas las cabezas estarán rapadas.
Amós 8:3
Los cantos del palacio se convertirán en gemido en aquel día --declara el Señor DIOS. Muchos {serán} los cadáveres; en todo lugar {los} echarán fuera en silencio.
2 Samuel 13:19
Entonces Tamar se puso ceniza sobre la cabeza, rasgó el vestido de manga larga que llevaba puesto, y se fue gritando con las manos sobre la cabeza.
Isaías 36:22
Entonces Eliaquim, hijo de Hilcías, mayordomo de la casa {real,} el escriba Sebna y el cronista Joa, hijo de Asaf, fueron a Ezequías con sus vestidos rasgados, y le relataron las palabras del Rabsaces.
Isaías 47:5
Siéntate en silencio y entra en las tinieblas, hija de los caldeos, porque nunca más te llamarán soberana de reinos.
Jeremías 8:14
¿Por qué estamos {aún} sentados? Congregaos, y entremos en las ciudades fortificadas, y perezcamos allí, pues el SEÑOR nuestro Dios nos hace perecer y nos ha dado a beber agua envenenada, porque hemos pecado contra el SEÑOR.
Lamentaciones 4:5
Los que comían manjares andan desolados por las calles; los que se criaron entre púrpura abrazan estercoleros.
Lamentaciones 4:16
La presencia del SEÑOR los dispersó, no volverá a mirarlos. No honraron a los sacerdotes, ni tuvieron piedad de los ancianos.
Lamentaciones 5:12
Los príncipes fueron colgados de sus manos, los rostros de los ancianos no fueron respetados.
Lamentaciones 5:14
Los ancianos se han apartado de las puertas, los jóvenes de su música.
Ezequiel 27:31
se raparán la cabeza por tu causa y se ceñirán de cilicio; llorarán por ti, en la amargura de {su} alma, con amargo duelo.
Joel 1:8
Laméntate como virgen ceñida de cilicio por el esposo de su juventud.
Amós 5:13
Por tanto, el prudente se calla en ese tiempo, pues es tiempo malo.
Amós 8:13
En aquel día las doncellas hermosas y los jóvenes desfallecerán de sed.
Apocalipsis 18:19
Y echaron polvo sobre sus cabezas, y gritaban, llorando y lamentándose, diciendo: `` ¿Ay, ay, la gran ciudad en la cual todos los que tenían naves en el mar se enriquecieron a costa de sus riquezas!, porque en una hora ha sido asolada."
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido