Lamentaciones 2:14

Tus profetas vieron para ti vanidad y locura; y no descubrieron tu pecado para impedir tu cautiverio, sino que te predicaron vanas profecías y extravíos.

Isaías 58:1

Clama a voz en cuello, no te detengas; alza tu voz como trompeta, y anuncia a mi pueblo su rebelión, y a la casa de Jacob su pecado.

Jeremías 5:31

los profetas profetizaron mentira, y los sacerdotes dirigían por su propia mano; y mi pueblo así lo quiso. ¿Qué, pues, haréis al final de esto?

Ezequiel 22:28

Y sus profetas los recubrieron con lodo suelto, profetizándoles vanidad, y adivinándoles mentira, diciendo: Así dice Jehová el Señor; y Jehová no había hablado.

Jeremías 2:8

Los sacerdotes no dijeron: ¿Dónde está Jehová? Y los que tenían la ley no me conocieron; y los pastores se rebelaron contra mí, y los profetas profetizaron por Baal, y anduvieron tras lo que no aprovecha.

Jeremías 29:8-9

Porque así dice Jehová de los ejércitos, Dios de Israel: No os engañen vuestros profetas que están entre vosotros, ni vuestros adivinos; ni miréis a vuestros sueños que soñáis.

Ezequiel 22:25

Hay conspiración de sus profetas en medio de ella, como león rugiente que arrebata presa; devoraron almas, tomaron haciendas y honra, aumentaron sus viudas en medio de ella.

Isaías 9:15-16

El viejo y venerable de rostro es la cabeza; el profeta que enseña mentira, es la cola.

Jeremías 6:13-14

Porque desde el más chico de ellos hasta el más grande de ellos, cada uno sigue la avaricia; y desde el profeta hasta el sacerdote, todos son engañadores.

Jeremías 8:10-11

Por tanto, daré sus esposas a otros, y sus campos a quienes los posean; porque desde el chico hasta el grande cada uno sigue la avaricia, desde el profeta hasta el sacerdote todos practican el engaño.

Jeremías 14:13-15

Y yo dije: ¡Ah, Señor Jehová! he aquí que los profetas les dicen: No veréis espada, ni habrá hambre en vosotros, sino que en este lugar os daré paz verdadera.

Jeremías 23:11-17

Porque así el profeta como el sacerdote son fingidos; aun en mi casa hallé su maldad, dice Jehová.

Jeremías 23:22

Pero si ellos hubieran estado en mi secreto, habrían hecho oír mis palabras a mi pueblo; y lo habrían hecho volver de su mal camino, y de la maldad de sus obras.

Jeremías 23:25-29

Yo he oído lo que aquellos profetas dijeron, profetizando mentira en mi nombre, diciendo: Soñé, soñé.

Jeremías 23:31-34

He aquí yo contra los profetas, dice Jehová, que endulzan sus lenguas, y dicen: Él ha dicho.

Jeremías 23:36

Y nunca más os vendrá a la memoria decir: Carga de Jehová: porque la palabra de cada uno le será por carga; pues pervertisteis las palabras del Dios viviente, de Jehová de los ejércitos, Dios nuestro.

Jeremías 27:9-10

Y vosotros no prestéis oído a vuestros profetas, ni a vuestros adivinos, ni a vuestros soñadores, ni a vuestros agoreros, ni a vuestros encantadores, que os hablan diciendo: No serviréis al rey de Babilonia.

Jeremías 27:14-16

No escuchéis las palabras de los profetas que os hablan, diciendo: No serviréis al rey de Babilonia; porque os profetizan mentira.

Jeremías 28:15

Entonces el profeta Jeremías dijo al profeta Hananías: Ahora oye, Hananías; Jehová no te envió, y tú has hecho que este pueblo confíe en mentira.

Jeremías 37:19

¿Y dónde están vuestros profetas que os profetizaban, diciendo: No vendrá el rey de Babilonia contra vosotros, ni contra esta tierra?

Ezequiel 13:2-16

Hijo de hombre, profetiza contra los profetas de Israel que profetizan, y di a los que profetizan de su corazón: Oíd palabra de Jehová.

Ezequiel 13:22

Por cuanto entristecisteis con mentira el corazón del justo, al cual yo no entristecí, y esforzasteis las manos del impío, para que no se apartase de su mal camino, infundiéndole ánimo;

Miqueas 2:11

Si alguno que anda en el espíritu de falsedad mintiere, diciendo: Yo te profetizaré de vino y de sidra; este tal será profeta a este pueblo.

Miqueas 3:5-7

Así dice Jehová acerca de los profetas que hacen errar a mi pueblo, que muerden con sus dientes, y claman: Paz, y contra el que no les da de comer, declaran guerra.

Sofonías 3:4

Sus profetas son livianos, hombres prevaricadores; sus sacerdotes contaminaron el santuario, falsearon la ley.

2 Pedro 2:1-3

Pero hubo también falsos profetas entre el pueblo, como habrá entre vosotros falsos maestros, que introducirán encubiertamente herejías destructoras, y aun negarán al Señor que los rescató, atrayendo sobre sí mismos destrucción repentina.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)