Lucas 2:35

(Y una espada traspasará también tu misma alma), para que sean revelados los pensamientos de muchos corazones.

Juan 19:25

Y estaban junto a la cruz de Jesús su madre, y la hermana de su madre, María esposa de Cleofas, y María Magdalena.

Deuteronomio 8:2

Y te acordarás de todo el camino por donde te ha traído Jehová tu Dios estos cuarenta años en el desierto, para afligirte, para probarte, para saber lo que había en tu corazón, si habías de guardar o no sus mandamientos.

Jueces 5:15-16

Príncipes también de Isacar fueron con Débora; y como Isacar, también Barac fue enviado a pie por el valle. Por las divisiones de Rubén hubo grandes impresiones del corazón.

Salmos 42:10

como con una espada en mis huesos? Mis enemigos me afrentan, diciéndome cada día: ¿Dónde está tu Dios?

Mateo 12:24-35

Mas los fariseos oyéndolo decían: Éste no echa fuera los demonios sino por Belcebú, príncipe de los demonios.

Lucas 16:14-15

Y oían también todas estas cosas los fariseos, los cuales eran avaros, y se burlaban de Él.

Juan 8:42-47

Jesús entonces les dijo: Si Dios fuese vuestro Padre, ciertamente me amaríais; porque yo de Dios he salido, y he venido; pues no he venido de mí mismo, sino que Él me envió.

Juan 15:22-24

Si yo no hubiera venido, ni les hubiera hablado, no tendrían pecado, pero ahora no tienen excusa de su pecado.

Hechos 8:21-23

No tienes tú ni parte ni suerte en este asunto; porque tu corazón no es recto delante de Dios.

1 Corintios 11:19

Porque es necesario que también entre vosotros haya herejías, para que los que son aprobados se manifiesten entre vosotros.

1 Juan 2:19

Salieron de nosotros, pero no eran de nosotros; porque si hubiesen sido de nosotros, habrían permanecido con nosotros; pero salieron para que se manifestase que no todos son de nosotros.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)