Lucas 5:12
Y aconteció que estando en una ciudad, he aquí un hombre lleno de lepra, el cual viendo a Jesús, postrándose sobre el rostro, le rogó, diciendo: Señor, si quieres, puedes limpiarme.
Mateo 8:2-4
Y he aquí un leproso vino, y le adoraba, diciendo: Señor, si quisieres, puedes limpiarme.
Mateo 9:28
Y llegado a la casa, vinieron a él los ciegos; y Jesús les dice: ¿Creéis que puedo hacer esto? Ellos dicen: Sí, Señor.
Lucas 17:16
y se derribó sobre el rostro a sus pies, dándole gracias; y éste era samaritano.
Génesis 18:14
¿Por ventura hay para Dios alguna cosa difícil? Al tiempo señalado volveré a ti, según el tiempo de la vida, y Sara tendrá un hijo.
Éxodo 4:6
Y le dijo además el SEÑOR: Mete ahora tu mano en tu seno. Y él metió la mano en su seno; y cuando la sacó, he aquí que su mano estaba leprosa como la nieve.
Levítico 9:24
Y salió un fuego de delante del SEÑOR, el cual consumió el holocausto y los sebos sobre el altar; y viéndolo todo el pueblo, alabaron, y cayeron sobre sus rostros.
Levítico 13:1-14
Y habló el SEÑOR a Moisés y a Aarón, diciendo:
Números 12:10-12
Y la nube se apartó del tabernáculo; y he aquí que María era leprosa como la nieve; y miró Aarón a María, y he aquí que estaba leprosa.
Deuteronomio 24:8
Guárdate de llaga de lepra, guardando diligentemente, y haciendo según todo lo que os enseñaren los sacerdotes levitas; cuidaréis de hacer como les he mandado.
Josué 5:14
Y él respondió: No; mas yo soy el Príncipe del ejército del SEÑOR; ahora he venido. Entonces Josué postrándose sobre su rostro en tierra le adoró; y le dijo: ¿Qué dice mi Señor a su siervo?
1 Reyes 18:39
Y viéndolo, todo el pueblo, cayeron sobre sus rostros, y dijeron: ¡El SEÑOR es el Dios! ¡El SEÑOR es el Dios!
2 Reyes 5:1
Naamán, general del ejército del rey de Siria, era gran varón delante de su señor, y en alta estima, porque el SEÑOR había dado salud a la Siria por él. Era este hombre valeroso de virtud, pero leproso.
2 Reyes 5:27
La lepra de Naamán se te pegará a ti, y a tu simiente para siempre. Y salió de delante de él leproso, blanco como la nieve.
2 Reyes 7:3
Y había cuatro hombres leprosos a la entrada de la puerta, los cuales dijeron el uno al otro: ¿Para qué nos estamos aquí hasta que muramos?
1 Crónicas 21:16
Y alzando David sus ojos, vio al ángel del SEÑOR, que estaba entre el cielo y la tierra, teniendo una espada desnuda en su mano extendida contra Jerusalén. Entonces David y los ancianos se postraron sobre sus rostros, cubiertos de cilicio.
2 Crónicas 26:19-20
Y se airó Uzías, que tenía el incienso en la mano para quemarlo; y en esta su ira contra los sacerdotes, la lepra le salió en la frente delante de los sacerdotes en la Casa del SEÑOR, junto al altar del incienso.
Salmos 50:15
Y llámame en el día de la angustia; te libraré, y tú me honrarás.
Salmos 91:15
Me invocará, y yo le responderé; con él estaré yo en la angustia; lo libraré, y le glorificaré.
Mateo 8:8-9
Y respondió el centurión, y dijo: Señor, no soy digno de que entres debajo de mi techado; mas solamente di con la palabra, y mi criado sanará.
Mateo 26:6
Y estando Jesús en Betania, en casa de Simón el leproso,
Marcos 1:40-45
Y un leproso vino a él, rogándole; e hincada la rodilla, le dice: Si quieres, puedes limpiarme.
Marcos 5:23
y le rogaba mucho, diciendo: Mi hija está a la muerte; ven y pondrás las manos sobre ella para que sea salva, y vivirá.
Marcos 9:22-24
y muchas veces le echa en el fuego y en aguas, para matarle; mas, si puedes algo, ayúdanos, teniendo misericordia de nosotros.
Lucas 17:12-13
Y entrando en una aldea, le salieron al encuentro diez hombres leprosos, los cuales se pararon de lejos,
Hebreos 7:25
por lo cual puede también salvar eternamente a los que por él se allegan a Dios, viviendo siempre para rogar por ellos.
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido