Lucas 6:21
Bienaventurados los que ahora tenéis hambre; porque seréis saciados. Bienaventurados los que ahora lloráis, porque reiréis.
Mateo 5:4
Bienaventurados los que lloran (enlutados) , porque ellos recibirán consolación.
Lucas 6:25
¡Ay de vosotros, los que estáis hartos! Porque tendréis hambre. ¡Ay de vosotros, los que ahora reís! Porque lamentaréis y lloraréis.
Salmos 17:15
Yo en justicia veré tu rostro; seré saciado cuando despertaré a tu semejanza.
Isaías 55:1-2
A todos los sedientos: Venid a las aguas. Y los que no tienen dinero, venid, comprad, y comed. Venid, comprad, sin dinero y sin precio, vino y leche.
Isaías 61:1-3
El espíritu del Señor DIOS es sobre mí, porque me ungió el SEÑOR; me envió a predicar a los abatidos, a atar las llagas de los quebrantados de corazón; a publicar libertad a los cautivos, y a los presos apertura de la cárcel;
Mateo 5:6
Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia (o rectitud) , porque ellos serán saciados.
Lucas 1:53
A los hambrientos colmó de bienes; y a los ricos envió vacíos.
Génesis 17:17
Entonces Abraham cayó sobre su rostro, y se rió, y dijo en su corazón: ¿A hombre de cien años ha de nacer hijo ? ¿Y si Sara, ya de noventa años, ha de dar a luz?
Génesis 21:6
Entonces dijo Sara: Dios me ha hecho reir, y cualquiera que lo oyere, se reirá conmigo.
Salmos 6:6-8
Heme consumido a fuerza de gemir; todas las noches inundo mi lecho, riego mi estrado con mis lágrimas.
Salmos 28:7
El SEÑOR es mi fortaleza y mi escudo; en él esperó mi corazón, y fui ayudado; por tanto se gozó mi corazón, y con mi canción le alabaré.
Salmos 30:11-12
Has tornado mi endecha en baile; desataste mi cilicio, y me ceñiste de alegría.
Salmos 42:1-3
Al Vencedor: Masquil a los hijos de Coré. Como el ciervo brama por las corrientes de las aguas, así clama por ti, oh Dios, el alma mía.
Salmos 63:1-5
Salmo de David, estando en el desierto de Judá. Dios, Dios mío eres tú; a ti madrugaré; mi alma tuvo sed de ti, mi carne te desea en tierra de sequedad y transida sin aguas.
Salmos 65:4
Dichoso el que tú escogieres, e hicieres llegar para que habite en tus atrios; seremos saciados del bien de tu Casa, de tu santo templo.
Salmos 107:9
Porque sació al alma menesterosa, y llenó de bien al alma hambrienta.
Salmos 119:136
Ríos de agua descendieron de mis ojos, porque no guardaban tu ley.
Salmos 126:1-2
Canción de las gradas. Cuando el SEÑOR hiciere tornar la cautividad de Sion, seremos como los que sueñan.
Salmos 126:5-6
Los que sembraron con lágrimas, con regocijo segarán.
Salmos 143:6
Extendí mis manos a ti; mi alma a ti como la tierra sedienta. (Selah.)
Eclesiastés 7:2-3
Mejor es ir a la casa del luto que a la casa del convite; porque aquello es el fin de todos los hombres; y el que vive se advertirá.
Isaías 12:1-2
Y dirás en aquel día: Cantaré a ti, oh SEÑOR; pues aunque te enojaste contra mí, tu furor se apartó, y me has consolado.
Isaías 25:6
Y el SEÑOR de los ejércitos hará en este monte a todos los pueblos convite de engordados, convite de vinos purificados, de gruesos tuétanos, de purificados líquidos.
Isaías 30:19
Ciertamente el pueblo morará en Sion, en Jerusalén; nunca más llorarás; el que tiene misericordia tendrá misericordia de ti; al oír la voz de tu clamor te responderá.
Isaías 44:3-4
Porque yo derramaré aguas sobre el sediento, y ríos sobre la tierra árida. Derramaré mi Espíritu sobre tu generación, y mi bendición sobre tus renuevos;
Isaías 49:9-10
Para que digas a los presos: Salid; y a los que están en tinieblas: Manifestaos. Sobre los caminos serán apacentados, y en todas las cumbres serán sus pastos.
Isaías 57:17-18
Por la iniquidad de su codicia me enojé, y le herí; escondí mi rostro y me ensañé; y fue él rebelde por el camino de su corazón.
Isaías 65:13-14
Por tanto, así dijo el Señor DIOS: He aquí que mis siervos comerán, y vosotros tendréis hambre. He aquí que mis siervos beberán, y vosotros tendréis sed; he aquí, que mis siervos se alegrarán, y vosotros seréis avergonzados;
Isaías 66:10
Alegraos con Jerusalén, y gozaos con ella, todos los que la amáis; llenaos con ella de gozo, todos los que os enlutáis por ella.
Jeremías 9:1
¡Oh, si mi cabeza se tornase aguas, y mis ojos fuentes de aguas, para que llore día y noche los muertos de la hija de mi pueblo!
Jeremías 13:17
Mas si no oyereis esto, en secreto llorará mi alma a causa de vuestra soberbia; y llorando amargamente, se desharán mis ojos en lágrimas, porque el rebaño del SEÑOR fue cautivo.
Jeremías 31:9
Irán con lloro, mas con misericordias los haré volver, y los haré andar junto a arroyos de aguas, por camino derecho en el cual no tropezarán; porque seré a Israel por Padre, y Efraín será mi primogénito.
Jeremías 31:13-14
Entonces la virgen se alegrará en la danza, los jóvenes y los viejos juntamente; y su lloro tornaré en gozo, y los consolaré, y los alegraré de su dolor.
Jeremías 31:18-20
Escuchando, oí a Efraín que se lamentaba: Me azotaste, y fui castigado como novillo indómito; conviérteme y seré convertido; porque tú eres el SEÑOR mi Dios.
Jeremías 31:25
Porque embriagué el alma cansada, y llené toda alma entristecida.
Ezequiel 7:16
Y los que escaparen de ellos, estarán sobre los montes como palomas de los valles, gimiendo todos, cada uno por su iniquidad.
Ezequiel 9:4
Y le dijo el SEÑOR: Pasa por en medio de la ciudad, por en medio de Jerusalén, y pon una señal en la frente a los varones que gimen y que claman a causa de todas las abominaciones que se hacen en medio de ella.
Juan 4:10
Respondió Jesús y le dijo: Si conocieses el don de Dios, y quién es el que te dice: Dame de beber; tú pedirías de él, y él te daría agua viva.
Juan 6:35
Y Jesús les dijo: YO SOY el pan de vida; el que a mí viene, nunca tendrá hambre; y el que en mí cree, no tendrá sed jamás.
Juan 7:37-38
Mas en el postrer día, el día grande de la Fiesta, se puso de pie y clamó, diciendo: Si alguno tiene sed, venga a mí y beba.
Juan 11:35
Y lloró Jesús.
Juan 16:20-21
De cierto, de cierto os digo, que vosotros lloraréis y lamentaréis, y el mundo se alegrará; pero aunque vosotros estaréis tristes, vuestra tristeza se tornará en gozo.
Romanos 9:1-3
Verdad digo en el Cristo, no miento, dándome testimonio mi conciencia en el Espíritu Santo,
1 Corintios 4:11
Hasta esta hora hambrientos, y tenemos sed, y estamos desnudos, y somos heridos de golpes, y andamos vagabundos;
2 Corintios 1:4-6
el que nos consuela en todas nuestras tribulaciones, para que podamos también nosotros consolar a los que están en cualquier angustia, con la consolación con que nosotros somos consolados por Dios.
2 Corintios 6:10
como doloridos, mas siempre gozosos; como pobres, pero enriqueciendo a muchos; como los que no tienen nada, mas que lo poseen todo.
2 Corintios 7:10-11
Porque el dolor que es según Dios, hace enmienda saludable, de la cual no hay que arrepentirse; pero el dolor del mundo obra muerte.
2 Corintios 11:27
en trabajo y fatiga, en muchas vigilias, en hambre y sed, en muchos ayunos, en frío y en desnudez;
2 Corintios 12:10
Por lo cual me contento en las flaquezas, en las afrentas, en las necesidades, en las persecuciones, en las angustias por el Cristo; porque cuando soy flaco, entonces soy poderoso.
Santiago 1:2-4
Hermanos míos, tened por sumo gozo cuando os halléis en diversas pruebas,
Santiago 1:12
Bienaventurado el varón que padece con paciencia la tentación, porque cuando fuere probado, recibirá la corona de vida, que Dios ha prometido a los que le aman.
1 Pedro 1:6-8
En lo cual vosotros os alegráis, estando al presente un poco de tiempo afligidos en diversas tentaciones, si es necesario,
Apocalipsis 7:16
No tendrán más hambre ni sed, y el sol no caerá más sobre ellos, ni ningún otro calor;
Apocalipsis 21:3
Y oí una gran voz del cielo que decía: He aquí el tabernáculo de Dios con los hombres, y morará con ellos; y ellos serán su pueblo, y Dios mismo será con ellos y será su Dios.
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido