Marcos 10:45

Porque el Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir, y dar su vida en rescate por muchos.

Mateo 20:28

así como el Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir, y para dar su vida en rescate por muchos.

Isaías 53:10-12

Con todo eso, Jehová quiso quebrantarlo, sujetándole a padecimiento. Cuando hubiere puesto su alma en expiación por el pecado, verá su linaje, prolongará sus días, y la voluntad de Jehová será en su mano prosperada.

Daniel 9:26

Y después de las sesenta y dos semanas se quitará la vida al Mesías, mas no por sí; y el pueblo del príncipe que ha de venir, destruirá la ciudad y el santuario; con inundación será el fin de ella, y hasta el fin de la guerra las asolaciones están determinadas.

Juan 13:14

Pues si yo, vuestro Señor y Maestro, he lavado vuestros pies, vosotros también debéis lavaros los pies los unos a los otros.

Filipenses 2:5-8

Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús;

Tito 2:14

quien se dio a sí mismo por nosotros para redimirnos de toda iniquidad, y purificar para sí un pueblo peculiar, celoso de buenas obras.

1 Pedro 1:19

sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin contaminación;

Daniel 9:24

Setenta semanas están determinadas sobre tu pueblo y sobre tu santa ciudad, para acabar la prevaricación, y concluir el pecado, y expiar la iniquidad; y para traer la justicia eterna, y sellar la visión y la profecía, y ungir al Santo de los santos.

Lucas 22:26-27

mas no así vosotros; antes el que es mayor entre vosotros, sea como el menor; y el que es príncipe, sea como el siervo.

Juan 10:15

Como el Padre me conoce, así también yo conozco al Padre; y pongo mi vida por las ovejas.

2 Corintios 5:21

Al que no conoció pecado, lo hizo pecado por nosotros, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en Él.

2 Corintios 8:9

Porque ya sabéis la gracia de nuestro Señor Jesucristo, que por amor de vosotros, siendo rico se hizo pobre; para que vosotros con su pobreza fueseis enriquecidos.

Gálatas 3:13

Cristo nos redimió de la maldición de la ley, hecho por nosotros maldición (porque escrito está: Maldito todo aquel que es colgado en un madero),

1 Timoteo 3:4-6

que gobierne bien su propia casa, que tenga sus hijos en sujeción con toda honestidad

Hebreos 5:8

Y aunque era Hijo, por lo que padeció aprendió la obediencia;

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)