Mateo 11:1
Y aconteció que cuando Jesús terminó de dar comisión a sus doce discípulos, se fue de allí a enseñar y predicar en las ciudades de ellos.
Mateo 9:35
Y recorría Jesús todas las ciudades y aldeas, enseñando en las sinagogas de ellos, y predicando el evangelio del reino, y sanando toda enfermedad y todo achaque en el pueblo.
Isaías 61:1-3
El Espíritu de Jehová el Señor está sobre mí, porque me ha ungido Jehová; me ha enviado a predicar buenas nuevas a los abatidos, a vendar a los quebrantados de corazón, a publicar libertad a los cautivos, y a los presos apertura de la cárcel;
Mateo 4:23
Y recorría Jesús toda Galilea, enseñando en las sinagogas de ellos, y predicando el evangelio del reino, y sanando toda enfermedad y toda dolencia en el pueblo.
Mateo 7:28
Y fue que, cuando Jesús hubo acabado estas palabras, la gente se maravillaba de su doctrina;
Mateo 28:20
enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén.
Marcos 1:38-39
Y Él les dijo: Vamos a las ciudades vecinas, para que predique también allí, porque para esto he venido.
Lucas 4:15-21
Y Él enseñaba en las sinagogas de ellos, y era glorificado de todos.
Lucas 8:1
Y aconteció después, que caminaba Él por todas las ciudades y aldeas, predicando y anunciando el evangelio del reino de Dios, y los doce con Él,
Juan 15:10
Si guardáis mis mandamientos, permaneceréis en mi amor; como también yo he guardado los mandamientos de mi Padre, y permanezco en su amor.
Juan 15:14
Vosotros sois mis amigos, si hacéis lo que yo os mando.
Hechos 1:2
hasta el día en que fue recibido arriba, después de haber dado mandamientos por el Espíritu Santo a los apóstoles que Él había escogido;
Hechos 10:38
cómo Dios ungió a Jesús de Nazaret con el Espíritu Santo y con poder; el cual anduvo haciendo el bien, y sanando a todos los oprimidos del diablo; porque Dios estaba con Él.
Hechos 10:42
Y nos mandó que predicásemos al pueblo, y testificásemos que Él es el que Dios ha puesto por Juez de vivos y muertos.
1 Tesalonicenses 4:2
Porque ya sabéis qué mandamientos os dimos por el Señor Jesús.
2 Tesalonicenses 3:6
Ahora os mandamos, hermanos, en el nombre de nuestro Señor Jesucristo, que os apartéis de todo hermano que anduviere desordenadamente, y no conforme a la doctrina que recibió de nosotros:
2 Tesalonicenses 3:10
Porque aun cuando estábamos con vosotros, os mandábamos esto: Si alguno no quiere trabajar, tampoco coma.
1 Timoteo 6:14
que guardes este mandamiento sin mácula ni reprensión, hasta la aparición de nuestro Señor Jesucristo:
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido