Mateo 18:10

Mirad que no tengáis en poco a uno de estos pequeñitos; porque os digo que sus ángeles en el cielo ven siempre la faz de mi Padre que está en el cielo.

Lucas 1:19

Y respondiendo el ángel le dijo: Yo soy Gabriel, que estoy delante de Dios; y soy enviado a hablarte y darte estas buenas nuevas.

Hebreos 1:14

¿No son todos espíritus ministradores, enviados para servicio a favor de los que serán herederos de salvación?

Salmos 34:7

El ángel de Jehová acampa en derredor de los que le temen, y los defiende.

Salmos 91:11

Pues a sus ángeles mandará acerca de ti, que te guarden en todos tus caminos;

Ester 1:14

y estaban junto a él, Carsena, y Setar, y Admata, y Tarsis, y Meres, y Marsena, y Memucán, siete príncipes de Persia y de Media que veían la cara del rey, y se sentaban los primeros del reino);

Lucas 16:22

Y aconteció que murió el mendigo, y fue llevado por los ángeles al seno de Abraham. Y murió también el rico, y fue sepultado.

Hechos 12:15

Y ellos le dijeron: Estás loca. Pero ella afirmaba que así era. Entonces ellos decían: Es su ángel.

Génesis 32:1-2

Y Jacob siguió su camino, y le salieron al encuentro ángeles de Dios.

2 Samuel 14:28

Y estuvo Absalón por espacio de dos años en Jerusalén, y no vio la cara del rey.

1 Reyes 22:19

Entonces él dijo: Oye pues palabra de Jehová: Yo vi a Jehová sentado en su trono, y todo el ejército del cielo estaba junto a Él, a su derecha y a su izquierda.

2 Reyes 6:16-17

Y él le dijo: No tengas miedo; porque más son los que están con nosotros que los que están con ellos.

Salmos 15:4

Aquel a cuyos ojos es menospreciado el vil; mas honra a los que temen a Jehová; el que aun jurando en daño suyo, no cambia;

Salmos 17:15

En cuanto a mí, yo en justicia veré tu rostro; quedaré satisfecho cuando despierte a tu semejanza.

Zacarías 4:10

Porque, ¿quién ha menospreciado el día de las pequeñeces? Pues se alegrarán, y verán la plomada en la mano de Zorobabel. Estos siete son los ojos de Jehová que recorren por toda la tierra.

Zacarías 13:7

Levántate, oh espada, sobre el pastor, y sobre el hombre compañero mío, dice Jehová de los ejércitos. Hiere al pastor, y se dispersarán las ovejas; y volveré mi mano sobre los pequeñitos.

Mateo 1:20

Y pensando él en esto, he aquí el ángel del Señor le apareció en un sueño, diciendo: José hijo de David, no temas recibir a María tu esposa, porque lo que en ella es engendrado, del Espíritu Santo es.

Mateo 2:13

Y habiendo ellos partido, he aquí el ángel del Señor apareció en un sueño a José, diciendo: Levántate, toma al niño y a su madre, y huye a Egipto, y quédate allá hasta que yo te diga; porque Herodes buscará al niño para matarlo.

Mateo 2:19

Y muerto Herodes, he aquí un ángel del Señor apareció en un sueño a José en Egipto,

Mateo 12:20

La caña cascada no quebrará, y el pábilo que humea no apagará, hasta que saque a victoria el juicio.

Mateo 18:6

Y cualquiera que haga tropezar a uno de estos pequeñitos que creen en mí; mejor le fuera que se le colgase al cuello una piedra de molino de asno, y que se le sumergiese en lo profundo del mar.

Mateo 18:14

Así, no es la voluntad de vuestro Padre que está en el cielo, que se pierda uno de estos pequeñitos.

Mateo 24:31

Y enviará a sus ángeles con gran voz de trompeta, y juntarán a sus escogidos de los cuatro vientos, desde un extremo del cielo hasta el otro.

Lucas 10:16

El que a vosotros oye, a mí me oye; y el que a vosotros desecha, a mí me desecha; y el que a mí me desecha, desecha al que me envió.

Hechos 5:19

Mas el ángel del Señor abrió de noche las puertas de la cárcel, y sacándolos, dijo:

Hechos 10:3

Éste vio claramente en visión, como a la hora novena del día, al Ángel de Dios que entraba a donde él estaba y le decía: Cornelio.

Hechos 12:7-11

Y he aquí, el ángel del Señor vino, y una luz resplandeció en la cárcel; y golpeando a Pedro en el costado, le despertó, diciendo: Levántate pronto. Y las cadenas se le cayeron de las manos.

Hechos 12:23

Y al instante el ángel del Señor le hirió, por cuanto no dio la gloria a Dios; y expiró comido de gusanos.

Hechos 27:23

Pues esta noche ha estado conmigo el Ángel del Dios de quien soy y a quien sirvo,

Romanos 14:1-3

Recibid al débil en la fe, pero no para contender sobre opiniones.

Romanos 14:10

Pero tú, ¿por qué juzgas a tu hermano? O tú también, ¿por qué menosprecias a tu hermano? Porque todos compareceremos ante el tribunal de Cristo.

Romanos 14:13-15

Por tanto, ya no nos juzguemos los unos a los otros, antes bien, juzgad esto; que nadie ponga tropiezo u ocasión de caer al hermano.

Romanos 14:21

Bueno es no comer carne, ni beber vino, ni nada en que tu hermano tropiece, o se ofenda, o sea debilitado.

Romanos 15:1

Así que los que somos fuertes debemos sobrellevar las flaquezas de los débiles, y no agradarnos a nosotros mismos.

1 Corintios 8:8-13

Si bien el alimento no nos hace más aceptos a Dios; pues ni porque comamos, seremos más; ni porque no comamos, seremos menos.

1 Corintios 9:22

A los débiles, me he hecho como débil, para ganar a los débiles: A todos me he hecho todo, para que de todos modos salve a algunos.

1 Corintios 11:22

¿Acaso no tenéis casas en que comáis y bebáis? ¿O menospreciáis la iglesia de Dios y avergonzáis a los que no tienen? ¿Qué os diré? ¿Os alabaré en esto? No os alabo.

1 Corintios 16:11

Por tanto, nadie le tenga en poco; sino encaminadle en paz, para que venga a mí; porque le espero con los hermanos.

2 Corintios 10:1

Y yo, Pablo mismo, os ruego por la mansedumbre y bondad de Cristo; yo que estando presente soy humilde entre vosotros, mas ausente soy osado para con vosotros;

2 Corintios 10:10

Porque a la verdad, dicen: Sus cartas son gravosas y fuertes; mas su presencia corporal es débil, y su palabra es menospreciable.

Gálatas 4:13-14

Vosotros sabéis que en flaqueza de la carne os prediqué el evangelio al principio,

Gálatas 6:1

Hermanos, si alguno fuere tomado en alguna falta, vosotros que sois espirituales, restaurad al tal en espíritu de mansedumbre, considerándote a ti mismo, no sea que tú también seas tentado.

1 Tesalonicenses 4:8

Así que, el que menosprecia, no menosprecia a hombre, sino a Dios, el cual también nos dio su Espíritu Santo.

1 Timoteo 4:12

Ninguno tenga en poco tu juventud; sino sé ejemplo de los creyentes en palabra, en conversación, en caridad, en espíritu, en fe, en pureza.

Apocalipsis 8:2

Y vi los siete ángeles que estaban en pie delante de Dios; y les fueron dadas siete trompetas.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)