Mateo 19:8

Él les dijo: Por la dureza de vuestro corazón Moisés os permitió repudiar a vuestras esposas; pero al principio no fue así.

Génesis 2:24

Por tanto, dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su esposa, y serán una sola carne.

Génesis 7:7

Y Noé entró en el arca, con sus hijos, su esposa, y las esposas de sus hijos, por causa de las aguas del diluvio.

Salmos 95:8

no endurezcáis vuestro corazón como en Meriba, como el día de Masah en el desierto;

Jeremías 6:16

Así dice Jehová: Paraos en los caminos, y mirad, y preguntad por las sendas antiguas, cuál es el buen camino, y andad por él, y hallaréis descanso para vuestra alma. Mas dijeron: No andaremos.

Zacarías 7:12

Y pusieron su corazón como diamante, para no oír la ley ni las palabras que Jehová de los ejércitos enviaba por su Espíritu, por medio de los profetas primeros; vino, por tanto, grande ira de parte de Jehová de los ejércitos.

Malaquías 2:13-14

Y esta otra vez haréis cubrir el altar de Jehová de lágrimas, de llanto, y de clamor; así que no miraré más a la ofrenda, para aceptarla con gusto de vuestra mano.

Mateo 3:15

Pero Jesús respondió, y le dijo: Deja ahora; porque nos es preciso cumplir así toda justicia. Entonces le dejó.

Mateo 8:31

Y los demonios le rogaron diciendo: Si nos echas fuera, permítenos ir a aquel hato de puercos.

Marcos 10:5

Y Jesús respondiendo, les dijo: Por la dureza de vuestro corazón os escribió este mandamiento,

1 Corintios 7:6

Pero esto digo por permisión, no por mandamiento.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)