Mateo 3:11

Yo a la verdad os bautizo en agua para arrepentimiento; mas el que viene tras mí, es más poderoso que yo; cuyo calzado no soy digno de llevar; Él os bautizará con el Espíritu Santo, y con fuego.

Hechos 1:5

Porque Juan a la verdad bautizó en agua, mas vosotros seréis bautizados con el Espíritu Santo no muchos días después de estos.

Lucas 3:16

Respondió Juan, diciendo a todos: Yo a la verdad os bautizo en agua; pero viene quien es más poderoso que yo, de quien no soy digno de desatar la correa de su calzado: Él os bautizará con el Espíritu Santo y fuego.

Isaías 4:4

cuando el Señor haya lavado las inmundicias de las hijas de Sión, y limpiado la sangre derramada en medio de Jerusalén, con espíritu de juicio y con espíritu de fuego.

Marcos 1:4

Bautizaba Juan en el desierto, y predicaba el bautismo de arrepentimiento para remisión de pecados.

Juan 1:15

Juan dio testimonio de Él, y clamó diciendo: Éste es de quien yo decía: El que viene después de mí, es antes de mí; porque era primero que yo.

Juan 1:26-27

Juan les respondió, diciendo: Yo bautizo en agua, mas en medio de vosotros está uno a quien vosotros no conocéis.

Hechos 11:15-16

Y cuando comencé a hablar, cayó el Espíritu Santo sobre ellos, como sobre nosotros al principio.

Hechos 13:24-25

predicando Juan, antes de su venida, el bautismo de arrepentimiento a todo el pueblo de Israel.

Hechos 19:4

Y Pablo les dijo: Juan bautizó con el bautismo de arrepentimiento, diciendo al pueblo que creyesen en Aquél que vendría después de él, esto es, en Cristo Jesús.

1 Corintios 12:13

Porque por un solo Espíritu somos todos bautizados en un cuerpo, ya ­sean judíos o gentiles, ya sean siervos o libres; y todos hemos bebido de un mismo Espíritu.

Isaías 44:3

Porque yo derramaré aguas sobre el que tiene sed, y ríos sobre la tierra árida; derramaré mi Espíritu sobre tu linaje, y mi bendición sobre tu descendencia;

Isaías 59:20-21

Y vendrá el Redentor a Sión, y a los que se volvieren de la iniquidad en Jacob, dice Jehová.

Zacarías 13:9

Y meteré en el fuego la tercera parte, y los refinaré como se refina la plata, y los probaré como se prueba el oro. Invocarán mi nombre, y yo les oiré, y diré: Pueblo mío; y ellos dirán: Jehová es mi Dios.

Malaquías 3:2-4

¿Y quién podrá resistir en el día de su venida? o ¿quién podrá mantenerse en pie cuando Él se manifieste? Porque Él es como fuego purificador, y como jabón de lavadores.

Mateo 3:6

y eran bautizados por él en el Jordán, confesando sus pecados.

Marcos 1:7-8

Y predicaba, diciendo: Viene tras mí uno que es más poderoso que yo, a quien no soy digno de desatar encorvado la correa de su calzado.

Lucas 1:17

Porque él irá delante de Él en el espíritu y el poder de Elías, para hacer volver los corazones de los padres a los hijos, y los desobedientes a la sabiduría de los justos, para preparar un pueblo dispuesto para el Señor.

Lucas 3:3

Y él vino por toda la tierra alrededor del Jordán predicando el bautismo del arrepentimiento para la remisión de pecados,

Lucas 7:6-7

Entonces Jesús fue con ellos. Y cuando ya no estaban lejos de su casa, el centurión le envió unos amigos, diciéndole: Señor, no te molestes, pues no soy digno de que entres bajo mi techo;

Juan 1:30

Éste es Aquél de quien yo dije: Después de mí viene un varón, el cual es antes de mí; porque era primero que yo.

Juan 1:33-34

y yo no le conocía; pero el que me envió a bautizar en agua, Éste me dijo: Sobre quien veas descender el Espíritu, y que permanece sobre Él, Éste es el que bautiza con el Espíritu Santo.

Juan 3:23-36

Y también Juan bautizaba en Enón, junto a Salim, porque allí había mucha agua; y venían, y eran bautizados.

Hechos 2:2-4

Y de repente vino un estruendo del cielo como de un viento recio que corría, el cual llenó toda la casa donde estaban sentados;

Gálatas 3:27-28

porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos.

Efesios 3:8

A mí, que soy menos que el más pequeño de todos los santos, me es dada esta gracia de predicar entre los gentiles el evangelio de las inescrutables riquezas de Cristo;

Tito 3:5

nos salvó, no por obras de justicia que nosotros hayamos hecho, sino por su misericordia, por el lavamiento de la regeneración y de la renovación del Espíritu Santo;

1 Pedro 5:5

Igualmente, jóvenes, sujetaos a los ancianos; y todos sujetaos unos a otros, y vestíos de humildad; porque Dios resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)