Miqueas 6:3

Pueblo mío, ¿qué te he hecho, o en qué te he molestado? Responde contra mí.

Jeremías 2:5

Así dice Jehová: ¿Qué maldad hallaron en mí vuestros padres, que se alejaron de mí, y se fueron tras la vanidad, y se tornaron vanos?

Isaías 43:22-23

Y no me invocaste a mí, oh Jacob; antes, de mí te cansaste, oh Israel.

Salmos 50:7

Oye, pueblo mío, y hablaré: Escucha, Israel, y testificaré contra ti: Yo soy Dios, el Dios tuyo.

Jeremías 2:31

¡Oh generación! atended vosotros la palabra de Jehová. ¿He sido yo a Israel soledad, o tierra de tinieblas? ¿Por qué ha dicho mi pueblo: Somos señores; nunca más vendremos a ti?

Salmos 51:4

Contra ti, contra ti sólo he pecado, y he hecho lo malo delante de tus ojos: Para que seas reconocido justo en tu palabra, y tenido por puro en tu juicio.

Salmos 81:8

Oye, pueblo mío y te protestaré. ¡Oh Israel, si me oyeres!

Salmos 81:13

¡Oh, si me hubiera oído mi pueblo, si Israel hubiera andado en mis caminos!

Miqueas 6:5

Pueblo mío, acuérdate ahora qué aconsejó Balac rey de Moab, y qué le respondió Balaam, hijo de Beor, desde Sitim hasta Gilgal, para que conozcas las justicias de Jehová.

Romanos 3:4-5

¡En ninguna manera! Antes bien, sea Dios veraz, y todo hombre mentiroso; como está escrito: Para que seas justificado en tus palabras, y venzas cuando seas juzgado.

Romanos 3:19

Pero sabemos que todo lo que la ley dice, a los que están bajo la ley lo dice; para que toda boca se tape, y todo el mundo sea hallado culpable delante de Dios.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)