Números 11:1
Y aconteció que el pueblo se quejó a oídos de Jehová; y lo oyó Jehová, y se enardeció su furor, y se encendió en ellos fuego de Jehová y consumió a los que estaban en un extremo del campamento.
Levítico 10:2
Y salió fuego de delante de Jehová que los quemó, y murieron delante de Jehová.
Números 16:35
Y salió fuego de Jehová, y consumió a los doscientos cincuenta hombres que ofrecían el incienso.
Deuteronomio 9:22
También en Tabera, y en Masah, y en Kibrot-hataava, enojasteis a Jehová.
2 Reyes 1:12
Y les respondió Elías, y dijo: Si yo soy varón de Dios, descienda fuego del cielo, y te consuma con tus cincuenta. Y el fuego de Dios descendió del cielo y lo consumió a él y a sus cincuenta.
Salmos 78:21
Por tanto, oyó Jehová, y se indignó: y se encendió el fuego contra Jacob, y el furor subió también contra Israel;
Salmos 106:18
Y se encendió el fuego en su junta; la llama quemó a los impíos.
Génesis 38:10
Y desagradó en ojos de Jehová lo que hacía, y a él también le quitó la vida.
Éxodo 15:23-24
Y llegaron a Mara, y no pudieron beber las aguas de Mara, porque eran amargas; por eso le pusieron el nombre de Mara.
Éxodo 16:2-3
Y toda la congregación de los hijos de Israel murmuró contra Moisés y Aarón en el desierto.
Éxodo 16:7
Y a la mañana veréis la gloria de Jehová; porque Él ha oído vuestras murmuraciones contra Jehová; porque nosotros, ¿qué somos, para que vosotros murmuréis contra nosotros?
Éxodo 16:9
Y dijo Moisés a Aarón: Di a toda la congregación de los hijos de Israel: Acercaos a la presencia de Jehová; que Él ha oído vuestras murmuraciones.
Éxodo 17:2-3
Y altercó el pueblo con Moisés, y dijeron: Danos agua que bebamos. Y Moisés les dijo: ¿Por qué altercáis conmigo? ¿Por qué tentáis a Jehová?
Números 10:33
Así partieron del monte de Jehová, camino de tres días; y el arca del pacto de Jehová fue delante de ellos camino de tres días, buscándoles lugar de descanso.
Números 20:2-5
Y como no hubiese agua para la congregación, se juntaron contra Moisés y Aarón.
Números 21:5
Y habló el pueblo contra Dios y Moisés: ¿Por qué nos hiciste subir de Egipto para que muramos en este desierto? Pues no hay pan, ni agua, y nuestra alma tiene fastidio de este pan tan liviano.
Deuteronomio 25:18
Que te salió al camino, y te desbarató la retaguardia de todos los débiles que iban detrás de ti, cuando tú estabas cansado y fatigado; y no temió a Dios.
Deuteronomio 32:22
Porque fuego se ha encendido en mi furor, y arderá hasta lo profundo del infierno; y devorará la tierra y sus frutos, y abrasará los fundamentos de los montes.
2 Samuel 11:27
Y pasado el luto, envió David y la trajo a su casa; y ella vino a ser su esposa, y le dio a luz un hijo. Mas esto que David había hecho, fue desagradable ante los ojos de Jehová.
Job 1:16
Aún estaba éste hablando, y vino otro que dijo: Fuego de Dios cayó del cielo, que quemó las ovejas y los criados, y los consumió; solamente escapé yo para traerte la noticia.
Isaías 30:33
Porque Tofet ya de tiempo está dispuesta y preparada para el rey, Él la hizo profunda y ancha; cuya pira es de fuego, y mucha leña; el soplo de Jehová, como torrente de azufre, la enciende.
Isaías 33:14
Los pecadores se asombraron en Sión, espanto sorprendió a los hipócritas. ¿Quién de nosotros morará con el fuego consumidor? ¿Quién de nosotros habitará con las llamas eternas?
Lamentaciones 3:39
¿Por qué murmura el hombre viviente, el hombre en su pecado?
Nahúm 1:5
Los montes tiemblan delante de Él, y los collados se disuelven; y la tierra se enciende a su presencia, y el mundo, y todos los que en él habitan.
Marcos 9:43-49
Y si tu mano te es ocasión de caer, córtala; mejor te es entrar en la vida manco, que teniendo dos manos ir al infierno, al fuego que nunca será apagado;
1 Corintios 10:10
Ni murmuréis, como algunos de ellos murmuraron, y fueron destruidos por el destructor.
Hebreos 12:29
porque nuestro Dios es fuego consumidor.
Santiago 5:4
He aquí, clama el jornal de los obreros que han segado vuestros campos, el cual por engaño no les ha sido pagado de vosotros; y los clamores de los que habían segado, han entrado en los oídos del Señor de los ejércitos.
Judas 1:16
Éstos son murmuradores, querellosos, andando según sus concupiscencias; y su boca habla palabras infladas, adulando a las personas para sacar provecho.
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido