Parallel Verses
Spanish: Sagradas Escrituras 1569
Hijo mío, no se aparten de tus ojos; guarda la sabiduría y el consejo;
La Biblia de las Américas
Hijo mío, no se aparten {estas cosas} de tus ojos, guarda la prudencia y la discreción,
Biblia del Jubileo 2000 (Grátis)
Hijo mío, no se aparten de tus ojos; guarda la sabiduría y el consejo;
Reina Valera 1909
Hijo mío, no se aparten estas cosas de tus ojos; Guarda la ley y el consejo;
La Nueva Biblia de los Hispanos
Hijo mío, no se aparten {estas cosas} de tus ojos; Guarda la prudencia y la discreción,
Spanish: Reina Valera Gómez
Hijo mío, no se aparten estas cosas de tus ojos; guarda la sabiduría y el consejo;
New American Standard Bible
My son, let them not vanish from your sight; Keep sound wisdom and discretion,
Referencias Cruzadas
Proverbios 4:21
No se aparten de tus ojos; guárdalas en medio de tu corazón.
Deuteronomio 4:9
Por tanto, guárdate, y guarda tu alma con diligencia, que no te olvides de las cosas que tus ojos han visto, ni se aparten de tu corazón todos los días de tu vida; y las enseñarás a tus hijos, y a los hijos de tus hijos.
Deuteronomio 6:6-9
Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón;
Deuteronomio 32:46-47
y les dijo: Poned vuestro corazón a todas las palabras que yo protesto hoy contra vosotros, para que las mandéis a vuestros hijos, y guarden y cumplan todas las palabras de esta ley.
Josué 1:8
El libro de esta ley nunca se apartará de tu boca; antes de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y entonces todo lo entenderás.
Proverbios 2:7
El guarda el ser a los rectos; es escudo a los que caminan perfectamente,
Proverbios 3:1-3
Hijo mío, no te olvides de mi ley; y tu corazón guarde mis mandamientos;
Juan 8:31
Y decía Jesús a los judíos que le habían creído: Si vosotros permaneciéreis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos;
Juan 15:6-7
El que no permanece en mí, será echado fuera como mal pámpano, y se secará; y los cogen, y los echan en el fuego, y arden.
Hebreos 2:1-3
Por lo cual es necesario que tanto con más diligencia guardemos las cosas que hemos oído, para que no nos escurramos.
1 Juan 2:24
Pues lo que habéis oído desde el principio, sea permaneciente en vosotros. Porque si lo que habéis oído desde el principio fuere permaneciente en vosotros, también vosotros permaneceréis en el Hijo y en el Padre.
1 Juan 2:27
Y la Unción que vosotros habéis recibido de él, permanece en vosotros; y no tenéis necesidad que ninguno os enseñe; mas como la Unción misma os enseña de todas cosas, y es verdadera, y no es mentira, así como os ha enseñado, permaneced en él.