Proverbios 30:3

Yo ni aprendí sabiduría, ni conozco la teología.

Proverbios 9:10

El temor del SEÑOR es el principio de la sabiduría; y la ciencia de lo santo es inteligencia.

Job 11:7-9

¿Alcanzarás tú el rastro de Dios? ¿Llegarás tú a la perfección del Todopoderoso?

Isaías 6:3

Y el uno al otro daba voces, diciendo: Santo, Santo, Santo, el SEÑOR de los ejércitos; toda la tierra está llena de su gloria.

Isaías 6:10

Engruesa el corazón de este pueblo, y agrava sus oídos, y ciega sus ojos; para que no vea con sus ojos, ni oiga con sus oídos, ni su corazón entienda; ni se convierta, y haya para él sanidad.

Isaías 30:11

Dejad el camino, apartaos de la senda, haced apartar de nuestra presencia al Santo de Israel.

Isaías 57:15

Porque así dijo el Alto y Sublime, el que habita en eternidad, y cuyo nombre es El Santo, que tengo por morada la altura y la santidad; y con el quebrantado y abatido de espíritu habito , para hacer vivir el espíritu de los abatidos, y para hacer vivir el corazón de los quebrantados.

Amós 7:14-15

Entonces respondió Amós, y dijo a Amasías: No soy profeta, ni soy hijo de profeta, sino que soy boyero, y cogedor de higos silvestres;

Mateo 11:27

Todas las cosas me son entregadas de mi Padre; y nadie conoció al Hijo, sino el Padre; ni al Padre conoció alguno, sino el Hijo, y aquel a quien el Hijo lo quisiere revelar.

Mateo 16:17

Entonces, respondiendo Jesús, le dijo: Bienaventurado eres, Simón, hijo de Jonás; porque no te lo reveló carne ni sangre, sino mi Padre que está en los cielos.

Juan 17:3

Esta empero es la vida eterna: que te conozcan el único Dios verdadero, y al que enviaste, Jesús, el Cristo.

Romanos 11:33

¡Oh profundidad de las riquezas de la sabiduría y de la ciencia de Dios! ¡Cuán incomprensibles son sus juicios, e inescrutables sus caminos!

Efesios 3:18-19

podáis bien comprender con todos los santos cuál sea la anchura y la longitud y la profundidad y la altura,

Apocalipsis 3:7

Y escribe al ángel de la Iglesia que está en Filadelfia: El Santo y Verdadero, que tiene la llave de David; que abre y ninguno cierra; que cierra y ninguno abre, dice estas cosas:

Apocalipsis 4:8

Y los cuatro animales tenían cada uno por sí seis alas alrededor; y de dentro estaban llenos de ojos; y no cesaban día ni noche, diciendo: Santo, Santo, Santo el Señor Dios Todopoderoso, el que era, y que es, y que ha de venir.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Sagradas Escrituras (1569)