Romanos 7:8

Pero el pecado, tomando ocasión por el mandamiento, produjo en mí toda codicia. Porque sin la ley el pecado estaba muerto.

Romanos 7:11

Porque el pecado, tomando ocasión por el mandamiento, me engañó, y por él me mató.

Romanos 4:15

Porque la ley produce ira; pero donde no hay ley, tampoco hay transgresión.

1 Corintios 15:56

El aguijón de la muerte es el pecado, y el poder del pecado es la ley.

Juan 15:22

Si yo no hubiera venido, ni les hubiera hablado, no tendrían pecado, pero ahora no tienen excusa de su pecado.

Juan 15:24

Si yo no hubiese hecho entre ellos obras que ningún otro ha hecho, no tendrían pecado; pero ahora también ellos las han visto, y nos han aborrecido a mí y a mi Padre.

Romanos 5:20

Y la ley entró para que el pecado abundase; pero cuando el pecado abundó, sobreabundó la gracia;

Romanos 7:13

¿Entonces lo que es bueno, vino a ser muerte para mí? ¡En ninguna manera! Pero el pecado, para mostrarse pecado, obró muerte en mí por lo que es bueno, a fin de que por el mandamiento, el pecado llegase a ser sobremanera pecaminoso.

Romanos 7:17

De manera que ya no soy yo quien lo hace, sino el pecado que mora en mí.

Santiago 1:14-15

sino que cada uno es tentado cuando de su propia concupiscencia es atraído, y seducido.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)