Romanos 8:34
¿Quién es el que condena? Cristo Jesús es el que murió, sí, más aún, el que resucitó, el que además está a la diestra de Dios, el que también intercede por nosotros.
Hebreos 7:25
Por lo cual El también es poderoso para salvar para siempre a los que por medio de El se acercan a Dios, puesto que vive perpetuamente para interceder por ellos.
Marcos 16:19
Entonces, el Señor Jesús, después de hablar con ellos, fue recibido en el cielo y se sentó a la diestra de Dios.
Romanos 8:1
Por consiguiente, no hay ahora condenación para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne sino conforme al Espíritu.
Romanos 8:27
y aquel que escudriña los corazones sabe cuál es el sentir del Espíritu, porque El intercede por los santos conforme a {la voluntad de} Dios.
Hebreos 9:24
Porque Cristo no entró en un lugar santo hecho por manos, una representación del verdadero, sino en el cielo mismo, para presentarse ahora en la presencia de Dios por nosotros,
Job 33:24
y que tenga piedad de él, y diga: ``Líbralo de descender a la fosa, he hallado {su} rescate";
Job 34:29
Cuando está quieto, ¿quién puede condenar{le?;} y cuando esconde su rostro, ¿quién puede contemplarle?; esto es, tanto nación como hombre,
Salmos 37:33
El SEÑOR no dejará al justo en sus manos, ni permitirá que lo condenen cuando sea juzgado.
Salmos 109:31
Porque El está a la diestra del pobre, para salvarlo de los que juzgan su alma.
Isaías 53:12
Por tanto, yo le daré parte con los grandes y con los fuertes repartirá despojos, porque derramó su alma hasta la muerte y con los transgresores fue contado, llevando El el pecado de muchos, e intercediendo por los transgresores.
Jeremías 50:20
``En aquellos días y en aquel tiempo" --declara el SEÑOR-- ``se buscará la iniquidad de Israel, pero no habrá ninguna, y los pecados de Judá, pero no se hallarán; porque perdonaré a los que yo haya dejado como remanente."
Mateo 20:28
Juan 14:19
Juan 16:23
Juan 16:26-27
Juan 17:20-24
Hechos 7:56-60
y dijo: He aquí, veo los cielos abiertos, y al Hijo del Hombre de pie a la diestra de Dios.
Romanos 4:25
el cual fue entregado por causa de nuestras transgresiones y resucitado para nuestra justificación.
Romanos 5:6-10
Porque mientras aún éramos débiles, a su tiempo Cristo murió por los impíos.
Romanos 14:9
Porque para esto Cristo murió y resucitó, para ser Señor tanto de los muertos como de los vivos.
Romanos 14:13
Por consiguiente, ya no nos juzguemos los unos a los otros, sino más bien decidid esto: no poner obstáculo o piedra de tropiezo al hermano.
Gálatas 3:13-14
Cristo nos redimió de la maldición de la ley, habiéndose hecho maldición por nosotros (porque escrito está: MALDITO TODO EL QUE CUELGA DE UN MADERO),
Colosenses 3:1
Si habéis, pues, resucitado con Cristo, buscad las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios.
Hebreos 1:3
El es el resplandor de su gloria y la expresión exacta de su naturaleza, y sostiene todas las cosas por la palabra de su poder. Después de llevar a cabo la purificación de los pecados, se sentó a la diestra de la Majestad en las alturas,
Hebreos 4:14-15
Teniendo, pues, un gran sumo sacerdote que trascendió los cielos, Jesús, el Hijo de Dios, retengamos nuestra fe.
Hebreos 8:1-2
Ahora bien, el punto principal de lo que se ha dicho {es éste:} tenemos tal sumo sacerdote, el cual se ha sentado a la diestra del trono de la Majestad en los cielos,
Hebreos 9:10-14
puesto que {tienen que ver} sólo con comidas y bebidas, y diversas abluciones y ordenanzas para el cuerpo, impuestas hasta el tiempo de reformar {las cosas}.
Hebreos 10:10-14
Por esta voluntad hemos sido santificados mediante la ofrenda del cuerpo de Jesucristo ofrecida de una vez para siempre.
Hebreos 10:19-22
Entonces, hermanos, puesto que tenemos confianza para entrar al Lugar Santísimo por la sangre de Jesús,
Hebreos 12:1-2
Por tanto, puesto que tenemos en derredor nuestro tan gran nube de testigos, despojémonos también de todo peso y del pecado que tan fácilmente nos envuelve, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante,
1 Pedro 3:18
Porque también Cristo murió por {los} pecados una sola vez, el justo por los injustos, para llevarnos a Dios, muerto en la carne pero vivificado en el espíritu;
1 Pedro 3:22
quien está a la diestra de Dios, habiendo subido al cielo después de que le habían sido sometidos ángeles, autoridades y potestades.
1 Juan 2:1-2
Hijitos míos, os escribo estas cosas para que no pequéis. Y si alguno peca, Abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo.
Apocalipsis 1:18
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido