Romanos 9:16
Así que no {depende} del que quiere ni del que corre, sino de Dios que tiene misericordia.
Isaías 65:1
Me dejé buscar por los que no preguntaban {por mí;} me dejé hallar por los que no me buscaban. Dije: ``Heme aquí, heme aquí", a una nación que no invocaba mi nombre.
Mateo 11:25-26
En aquel tiempo, hablando Jesús, dijo:
Lucas 10:21
En aquella misma hora El se regocijó mucho en el Espíritu Santo, y dijo:
Juan 1:12-13
Pero a todos los que le recibieron, les dio el derecho de llegar a ser hijos de Dios, {es decir,} a los que creen en su nombre,
Juan 3:8
Romanos 9:11
(porque cuando aún {los mellizos} no habían nacido, y no habían hecho nada, ni bueno ni malo, para que el propósito de Dios conforme a {su} elección permaneciera, no por las obras, sino por aquel que llama),
1 Corintios 1:26-31
Pues considerad, hermanos, vuestro llamamiento; no hubo muchos sabios conforme a la carne, ni muchos poderosos, ni muchos nobles;
Efesios 2:4-5
Pero Dios, que es rico en misericordia, por causa del gran amor con que nos amó,
Efesios 2:8
Porque por gracia habéis sido salvados por medio de la fe, y esto no de vosotros, {sino que es} don de Dios;
Filipenses 2:13
porque Dios es quien obra en vosotros tanto el querer como el hacer, para {su} beneplácito.
2 Tesalonicenses 2:13-14
Pero nosotros siempre tenemos que dar gracias a Dios por vosotros, hermanos amados por el Señor, porque Dios os ha escogido desde el principio para salvación mediante la santificación por el Espíritu y la fe en la verdad.
Tito 3:3-5
Porque nosotros también en otro tiempo éramos necios, desobedientes, extraviados, esclavos de deleites y placeres diversos, viviendo en malicia y envidia, aborrecibles {y} odiándonos unos a otros.
Santiago 1:18
En el ejercicio de su voluntad, El nos hizo nacer por la palabra de verdad, para que fuéramos las primicias de sus criaturas.
1 Pedro 2:9-10
Pero vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo {adquirido} para posesión {de Dios}, a fin de que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable;
Génesis 27:1-4
Y aconteció que siendo ya viejo Isaac, y sus ojos demasiado débiles para ver, llamó a Esaú, su hijo mayor, y le dijo: Hijo mío. Y él le respondió: Heme aquí.
Génesis 27:9-14
Ve ahora al rebaño y tráeme de allí dos de los mejores cabritos de las cabras, y yo prepararé con ellos un buen guisado para tu padre como a él le gusta.
Salmos 110:3
Tu pueblo se ofrecerá voluntariamente en el día de tu poder; en el esplendor de la santidad, desde el seno de la aurora; tu juventud es para ti {como} el rocío.
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido