Salmos 102:17

Habrá considerado la oración de los desamparados, y no habrá desechado el ruego de ellos.

Nehemías 1:6

Esté ahora atento tu oído, y tus ojos abiertos, para oír la oración de tu siervo, que yo hago ahora delante de ti día y noche, por los hijos de Israel tus siervos; y confieso los pecados de los hijos de Israel que hemos contra ti cometido; sí, yo y la casa de mi padre hemos pecado.

Salmos 22:24

Porque no menospreció ni abominó la aflicción del pobre, ni de él escondió su rostro; sino que cuando clamó a Él, le oyó.

Salmos 9:18

Porque no para siempre será olvidado el pobre; ni la esperanza de los pobres perecerá perpetuamente.

Salmos 72:12

Porque él librará al menesteroso que clamare, y al afligido que no tuviere quien le socorra.

Jeremías 29:11-14

Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis.

Daniel 9:3-21

Y volví mi rostro al Señor Dios, buscándole en oración y ruego, en ayuno, y cilicio y ceniza.

Deuteronomio 4:29

Mas si desde allí buscares a Jehová tu Dios, lo hallarás, si lo buscares con todo tu corazón y con toda tu alma.

Deuteronomio 32:36

Porque Jehová juzgará a su pueblo, y por amor de sus siervos se arrepentirá, cuando viere que su fuerza se ha ido, y que no queda preso o desamparado.

Nehemías 1:11-8

Te ruego, oh Señor, esté ahora atento tu oído a la oración de tu siervo, y a la oración de tus siervos, quienes desean temer tu nombre. Prospera a tu siervo hoy, y concédele hallar misericordia delante de aquel varón. Porque yo servía de copero al rey.

Salmos 69:23

Sean oscurecidos sus ojos para que no vean, y haz vacilar continuamente sus lomos.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)