Salmos 119:6

Entonces no sería yo avergonzado, cuando mirase en todos tus mandamientos.

Porque entonces te deleitarás en el Omnipotente, y alzarás a Dios tu rostro.

Sea mi corazón perfecto en tus estatutos; para que no sea yo avergonzado.

Y ahora, hijitos, permaneced en él, para que cuando apareciere, tengamos confianza, y no seamos confundidos de él en su venida.

Me he allegado a tus testimonios; oh SEÑOR, no me avergüences.

Por eso todos los mandamientos de todas las cosas estimé rectos; aborrecí todo camino de mentira.

Y muchos de los que duermen en el polvo de la tierra serán despertados, unos para vida eterna, y otros para vergüenza y confusión perpetua.

Vosotros sois mis amigos, si hiciereis las cosas que yo os mando.

Porque cualquiera que hubiere guardado toda la ley, y ofendiere en un punto, es hecho culpable de todos.

Y si nuestro corazón nos reprende, mayor es Dios que nuestro corazón, y conoce todas las cosas.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido