Salmos 127:1

«Cántico gradual: para Salomón» Si Jehová no edificare la casa, en vano trabajan los que la edifican; si Jehová no guardare la ciudad, en vano vela la guarda.

Salmos 33:16-18

El rey no es salvo con la multitud del ejército: No escapa el valiente por la mucha fuerza.

Proverbios 16:9

El corazón del hombre piensa su camino; mas Jehová endereza sus pasos.

Proverbios 21:30-31

No hay sabiduría, ni inteligencia, ni consejo, contra Jehová.

1 Corintios 3:7

Así que, ni el que planta es algo, ni el que riega; sino Dios, que da el crecimiento.

1 Crónicas 28:10

Mira, pues, ahora que Jehová te ha elegido para que edifiques casa para santuario; esfuérzate, y hazla.

1 Crónicas 28:20

Dijo más David a Salomón su hijo: Esfuérzate y sé valiente, y ponlo por obra; no temas ni desmayes, porque Jehová Dios, mi Dios, estará contigo; Él no te dejará, ni te desamparará, hasta que acabes toda la obra para el servicio de la casa de Jehová.

1 Crónicas 29:19

Asimismo da a mi hijo Salomón corazón perfecto, para que guarde tus mandamientos, y tus testimonios y tus estatutos, y para que haga todas las cosas, y te edifique la casa para la cual yo he hecho preparativos.

Salmos 78:69

Y edificó su santuario a manera de eminencia, como la tierra que cimentó para siempre.

Salmos 120:1

«Cántico gradual» Clamé a Jehová en mi angustia, y Él me respondió.

Salmos 121:1

«Cántico gradual» Alzaré mis ojos a los montes, de donde vendrá mi socorro.

Salmos 121:3-5

No dará tu pie al resbaladero; ni se dormirá el que te guarda.

Salmos 122:1

«Cántico gradual: de David» Yo me alegré con los que me decían: A la casa de Jehová iremos.

Salmos 123:1

«Cántico gradual» A ti levanto mis ojos, a ti que habitas en los cielos.

Salmos 124:1

«Cántico gradual: de David» A no haber estado Jehová por nosotros, diga ahora Israel;

Salmos 126:1

«Cántico gradual» Cuando Jehová hizo volver la cautividad de Sión, éramos como los que sueñan.

Eclesiastés 9:11

Me volví, y vi debajo del sol, que ni es de los ligeros la carrera, ni la guerra de los fuertes, ni aun de los sabios el pan, ni de los prudentes las riquezas, ni de los elocuentes el favor; sino que tiempo y ocasión acontece a todos.

Jeremías 51:12

Levantad bandera sobre los muros de Babilonia, reforzad la guardia, colocad centinelas, tended emboscadas; porque deliberó Jehová, y aun pondrá en efecto lo que ha dicho contra los moradores de Babilonia.

Zacarías 2:4-5

y le dijo: Corre, habla a este joven, diciendo: Sin muros será habitada Jerusalén a causa de la multitud de hombres y de ganado en medio de ella.

1 Corintios 3:9-15

Porque nosotros, colaboradores somos de Dios; y vosotros sois labranza de Dios, edificio de Dios.

1 Crónicas 22:10-11

Él edificará casa a mi nombre, y él me será a mí por hijo, y yo le seré por Padre; y afirmaré el trono de su reino sobre Israel para siempre.

Salmos 72:1

«Para Salomón» Oh Dios, da tus juicios al rey, y tu justicia al hijo del rey.

Salmos 125:1

«Cántico gradual» Los que confían en Jehová son como el monte de Sión que no se mueve; sino que permanece para siempre.

Cantares 3:3

Me hallaron los guardas que rondan la ciudad, y les dije: ¿Habéis visto al que ama mi alma?

Cantares 5:7

Me hallaron los guardas que rondan la ciudad; me hirieron, me golpearon, me quitaron mi manto de encima los guardas de los muros.

Isaías 21:5-12

Poned la mesa, observad desde la atalaya, comed, bebed; levantaos, príncipes, ungid el escudo.

Isaías 27:3

Yo Jehová la guardo, cada momento la regaré; la guardaré de noche y de día, para que nadie la dañe.

Isaías 56:10

Sus atalayas ciegos son, todos ellos ignorantes; todos son perros mudos que no pueden ladrar; somnolientos, echados, aman el dormir.

Isaías 62:6

Sobre tus muros, oh Jerusalén, he puesto guardas; todo el día y toda la noche no callarán jamás. Los que os acordáis de Jehová, no descanséis,

Jeremías 51:31

Correo se encontrará con correo, mensajero se encontrará con mensajero, para noticiar al rey de Babilonia que su ciudad es tomada por todas partes:

Ezequiel 33:2-9

Hijo de hombre, habla a los hijos de tu pueblo, y diles: Cuando trajere yo espada sobre la tierra, y el pueblo de la tierra tomare un hombre de sus términos, y lo pusiere por atalaya,

1 Corintios 15:14

Y si Cristo no resucitó, vana es entonces nuestra predicación, vana es también vuestra fe.

Gálatas 4:11

Me temo de vosotros, que haya trabajado en vano con vosotros.

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Reina Valera Gómez (© 2010)