Salmos 137:5
Si me olvidare de ti, oh Jerusalén, mi diestra sea olvidada.
Nehemías 1:2-4
que vino Hanani, uno de mis hermanos, él y ciertos varones de Judá, y les pregunté por los judíos que habían escapado, que habían quedado de la cautividad, y por Jerusalén.
Nehemías 2:2-3
me dijo el rey: ¿Por qué está triste tu rostro, pues no estás enfermo? No es esto sino quebranto de corazón. Entonces temí en gran manera.
Salmos 84:1-2
Al Vencedor: sobre Gitit: A los hijos de Coré. Salmo. ¡Cuán amables son tus moradas, oh SEÑOR de los ejércitos!
Salmos 84:10
Porque mejor es un día en tus atrios que mil fuera de ellos ; escogí antes estar a la puerta en la Casa de mi Dios, que habitar en las moradas de maldad.
Salmos 102:13-14
Tú levantándote, tendrás misericordia de Sion; porque es tiempo de tener misericordia de ella, porque el plazo es llegado .
Salmos 122:5-9
Porque allá están los tronos del juicio, los tronos de la casa de David.
Isaías 62:1
Por causa de Sion no callaré, y por causa de Jerusalén no reposaré, hasta que salga como resplandor su justicia, y su salud se encienda como un hacha.
Isaías 62:6-7
Sobre tus muros, oh Jerusalén, he puesto guardas; todo el día y toda la noche no callarán jamás. Los que os acordáis del SEÑOR, no ceséis,
Jeremías 51:50
Los que escapasteis del cuchillo, andad, no os detengáis; acordaos por muchos días del SEÑOR, y acordaos de Jerusalén.
Daniel 6:10-11
Y Daniel, cuando supo que la escritura estaba firmada, entró en su casa, y abiertas las ventanas de su cenadero que estaban hacia Jerusalén, se arrodillaba tres veces al día, y oraba, y confesaba delante de su Dios, como lo solía hacer antes.
Zacarías 11:17
¡Ay del pastor inútil, que abandona el ganado! Espada sobre su brazo, y sobre su ojo derecho; del todo se secará su brazo, y enteramente será su ojo derecho oscurecido.
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido