Salmos 31:10

Porque se ha acabado mi vida con dolor, y mis años con suspiro; se ha enflaquecido mi fuerza a causa de mi iniquidad, y mis huesos se han consumido.

Salmos 38:3

No hay sanidad en mi carne a causa de tu ira; ni hay paz en mis huesos a causa de mi pecado.

Job 3:24

Porque antes que mi pan, viene mi suspiro; y mis bramidos corren como aguas.

Salmos 13:2

¿Hasta cuándo pondré consejos en mi alma, con ansiedad en mi corazón cada día? ¿Hasta cuándo será enaltecido mi enemigo sobre mí?

Salmos 32:3-4

Mientras callé, se envejecieron mis huesos en mi gemir todo el día.

Salmos 39:11

Con castigos sobre la iniquidad corriges al hombre, y haces consumirse como de polilla su grandeza; ciertamente vanidad es todo hombre. (Selah.)

Salmos 71:9

No me deseches en el tiempo de la vejez; cuando mi fuerza se acabare, no me desampares.

Salmos 78:33

Consumió por tanto sus días en vanidad, y sus años en tribulación.

Salmos 88:15

Yo soy pobre y menesteroso; desde la juventud he llevado tus temores, he estado medroso.

Salmos 102:3-28

Porque mis días se han consumido como humo; y mis huesos son quemados como en hogar.

Romanos 9:2

que tengo gran tristeza y continuo dolor en mi corazón.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Biblia del Jubileo 2000 (Grátis) copyright