Salmos 31:15

En tu mano están mis tiempos: Líbrame de la mano de mis enemigos, y de mis perseguidores.

Job 24:1

Puesto que no son ocultos los tiempos al Todopoderoso, ¿Por qué los que le conocen no ven sus días?

2 Samuel 7:12

Y cuando tus días fueren cumplidos, y durmieres con tus padres, yo estableceré tu simiente después de ti, la cual procederá de tus entrañas, y afirmaré su reino.

1 Samuel 26:10

Dijo además David: Vive Jehová, que si Jehová no lo hiriere, o que su día llegue para que muera, o que descendiendo en batalla perezca,

Salmos 17:8-9

Guárdame como a la niña de tu ojo, escóndeme bajo la sombra de tus alas,

Salmos 17:13

Levántate, oh Jehová; sal a su encuentro, póstrale; libra mi alma del malo con tu espada;

Salmos 71:10-12

Porque mis enemigos hablan contra mí; y los que acechan mi alma, consultaron juntamente.

Salmos 116:15

Estimada es a los ojos de Jehová la muerte de sus santos.

Salmos 142:6

Escucha mi clamor, porque estoy muy abatido; líbrame de los que me persiguen, porque son más fuertes que yo.

Salmos 143:3

Porque el enemigo ha perseguido mi alma; ha postrado en tierra mi vida; me ha hecho habitar en tinieblas como los ya muertos.

Salmos 143:9

Líbrame de mis enemigos, oh Jehová: En ti me refugio.

Salmos 143:12

Y por tu misericordia disipa a mis enemigos, y destruye a todos los adversarios de mi alma; porque yo soy tu siervo.

Eclesiastés 3:1-8

Para todo hay sazón, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su tiempo:

Jeremías 15:20-21

Y te daré para este pueblo por muro fortificado de bronce, y pelearán contra ti, y no te vencerán: porque yo estoy contigo para salvarte y para librarte, dice Jehová.

Lucas 9:51

Y aconteció, que cumpliéndose el tiempo en que había de ser recibido arriba, Él afirmó su rostro para ir a Jerusalén.

Juan 7:6

Entonces Jesús les dijo: Mi tiempo aún no ha venido; mas vuestro tiempo siempre está presto.

Juan 7:30

Entonces procuraban prenderle; pero ninguno puso mano sobre Él, porque aún no había llegado su hora.

Juan 12:27

Ahora está turbada mi alma; ¿y qué diré? ¡Padre, sálvame de esta hora! Mas para esto he venido a esta hora.

Juan 13:1

Y antes de la fiesta de la pascua, sabiendo Jesús que su hora había llegado para que pasase de este mundo al Padre, como había amado a los suyos que estaban en el mundo, los amó hasta el fin.

Juan 17:1

Estas cosas habló Jesús, y levantando los ojos al cielo, dijo: Padre, la hora ha llegado; glorifica a tu Hijo, para que tu Hijo también te glorifique a ti.

Hechos 1:7

Y Él les dijo: No toca a vosotros saber los tiempos o las sazones, que el Padre puso en su sola potestad;

Hechos 23:11

Y a la noche siguiente se le presentó el Señor y le dijo: Ten ánimo, Pablo; pues como has testificado de mí en Jerusalén, así es necesario que testifiques también en Roma.

Hechos 27:24

diciendo: Pablo, no temas; es necesario que comparezcas ante César; y he aquí, Dios te ha dado todos los que navegan contigo.

2 Timoteo 4:6

Porque yo ya estoy para ser sacrificado, y el tiempo de mi partida está cercano.

2 Pedro 1:14

sabiendo que en breve debo dejar mi tabernáculo, como nuestro Señor Jesucristo me ha declarado.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)