Salmos 64:6
Escudriñan iniquidades, perfeccionan y ponen en efecto lo que inventaron en lo íntimo de cada uno, y en su corazón inventivo.
1 Samuel 22:9
Entonces Doeg idumeo, que era señor entre los siervos de Saúl, respondió y dijo: Yo vi al hijo de Isaí que vino a Nob, a Ahimelec hijo de Ahitob;
1 Samuel 24:9
Y dijo David a Saúl: ¿Por qué oyes las palabras de los que dicen: Mira que David procura tu mal?
1 Samuel 25:10
Y Nabal respondió a los criados de David, y dijo: ¿Quién es David? ¿Y quién es el hijo de Isaí? Muchos siervos hay hoy que huyen de sus señores.
Salmos 5:9
Porque no hay en su boca rectitud; sus entrañas son pravedades; sepulcro abierto es su garganta, con su lengua lisonjearán.
Salmos 35:11
Se levantaron testigos falsos; me demandaron lo que no sabía;
Salmos 49:11
En su interior piensan que sus casas son eternas, y sus habitaciones para generación y generación; llamaron sus tierras de sus nombres.
Proverbios 20:5
Como aguas profundas es el consejo en el corazón del hombre; mas el hombre entendido lo alcanzará a sacar .
Isaías 29:15
¡Ay de los que se esconden del SEÑOR, encubriendo el consejo; y sus obras son en tinieblas, y dicen: ¿Quién nos ve, o quién nos conoce?
Jeremías 17:9-10
Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿quién lo conocerá?
Daniel 6:4-5
Entonces los presidentes y gobernadores buscaban ocasiones contra Daniel por parte del reino; mas no podían hallar alguna ocasión o falta, porque él era fiel, y ningún vicio ni falta fue en él hallado.
Mateo 26:59
Y los príncipes de los sacerdotes, y los ancianos, y todo el consejo, buscaban falso testimonio contra Jesús, para entregarlo a la muerte;
Juan 18:29-30
Entonces salió Pilato a ellos fuera, y dijo: ¿Qué acusación traéis contra este hombre?
Juan 19:7
Le respondieron los judíos: Nosotros tenemos ley, y según nuestra ley debe morir, porque se hizo Hijo de Dios.
1 Corintios 4:5
Así que, no juzguéis nada antes de tiempo, hasta que venga el Señor, el cual también aclarará lo oculto de las tinieblas, y manifestará los intentos de los corazones; y entonces cada uno tendrá de Dios la alabanza.
Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido