Salmos 84:3

Aun el gorrión halla casa, y la golondrina nido para sí, donde ponga sus polluelos, en tus altares, oh Jehová de los ejércitos, Rey mío, y Dios mío.

Salmos 5:2

Está atento a la voz de mi clamor, Rey mío y Dios mío, porque a ti oraré.

Salmos 43:4

Y entraré al altar de Dios, a Dios mi alegría, mi gozo; y te alabaré con arpa, oh Dios, Dios mío.

Salmos 90:1

«Oración de Moisés varón de Dios» Señor, tú nos has sido refugio de generación en generación.

Salmos 91:1

El que habita al abrigo del Altísimo, morará bajo la sombra del Omnipotente.

Salmos 116:7

Vuelve, oh alma mía, a tu reposo; porque Jehová te ha hecho bien.

Mateo 8:20

Y Jesús le dijo: Las zorras tienen guaridas, y las aves del cielo nidos; mas el Hijo del Hombre no tiene donde recostar su cabeza.

Mateo 23:37

¡Jerusalén, Jerusalén, que matas a los profetas y apedreas a los que te son enviados! ¡Cuántas veces quise juntar tus hijos, como la gallina junta sus polluelos debajo de sus alas, y no quisiste!

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)