Salmos 9:16

Jehová es conocido por el juicio que hizo; en la obra de sus propias manos fue enlazado el malo. (Higaion. Selah)

Éxodo 7:5

Y sabrán los egipcios que yo soy Jehová, cuando extienda mi mano sobre Egipto, y saque los hijos de Israel de en medio de ellos.

Éxodo 14:4

Y yo endureceré el corazón de Faraón para que los siga; y seré glorificado en Faraón y en todo su ejército; y sabrán los egipcios que yo soy Jehová. Y ellos lo hicieron así.

Éxodo 14:10

Y cuando Faraón se hubo acercado, los hijos de Israel alzaron sus ojos, y he aquí los egipcios que venían tras ellos; por lo que los hijos de Israel temieron en gran manera, y clamaron a Jehová.

Éxodo 14:31

Y vio Israel aquel grande hecho que Jehová ejecutó contra los egipcios; y el pueblo temió a Jehová, y creyeron a Jehová y a Moisés su siervo.

Deuteronomio 29:22-28

Y dirá la generación venidera, vuestros hijos que vendrán después de vosotros, y el extranjero que vendrá de lejanas tierras, cuando vieren las plagas de esta tierra, y sus enfermedades de que Jehová la hizo enfermar

Josué 2:10-11

Porque hemos oído que Jehová hizo secar las aguas del Mar Rojo delante de vosotros, cuando salisteis de Egipto, y lo que habéis hecho a los dos reyes de los amorreos que estaban al otro lado del Jordán, a Sehón y a Og, a los cuales habéis destruido.

Jueces 1:7

Entonces dijo Adoni-bezec: Setenta reyes, cortados los pulgares de sus manos y de sus pies, recogían las migajas debajo de mi mesa; como yo hice, así me ha pagado Dios. Y le metieron en Jerusalén, donde murió.

1 Samuel 6:19-20

Entonces hirió Dios a los de Bet-semes, porque habían mirado en el arca de Jehová; hirió en el pueblo cincuenta mil setenta hombres. Y el pueblo puso luto, porque Jehová le había herido de tan gran plaga.

1 Samuel 17:46

Jehová te entregará hoy en mi mano, y yo te venceré, y te cortaré la cabeza; y daré hoy los cuerpos de los filisteos a las aves del cielo y a las bestias de la tierra: y sabrá toda la tierra que hay Dios en Israel.

2 Reyes 19:19

Ahora pues, oh Jehová Dios nuestro, sálvanos, te suplico, de su mano, para que sepan todos los reinos de la tierra que sólo tú, Jehová, eres Dios.

2 Reyes 19:34-35

Porque yo ampararé a esta ciudad para salvarla, por amor a mí mismo, y por amor a David mi siervo.

Salmos 5:1

«Al Músico principal: sobre Nehilot: Salmo de David» Escucha, oh Jehová, mis palabras; considera mi meditación.

Salmos 11:6

Sobre los malos lloverá lazos; fuego, azufre y terrible tempestad; ésta será la porción del cáliz de ellos.

Salmos 19:14

Sean gratos los dichos de mi boca y la meditación de mi corazón delante de ti, oh Jehová, Roca mía, y Redentor mío.

Salmos 48:11

Se alegrará el monte de Sión; se gozarán las hijas de Judá por tus juicios.

Salmos 58:10-11

Se alegrará el justo cuando viere la venganza; sus pies lavará en la sangre del impío.

Salmos 83:17-18

Sean afrentados y turbados para siempre; Sean avergonzados, y perezcan.

Salmos 92:3

en el decacordio y en el salterio, en tono suave con el arpa.

Salmos 140:9

En cuanto a los que por todas partes me rodean, la maldad de sus propios labios cubrirá su cabeza.

Proverbios 6:2

enlazado eres con las palabras de tu boca, y preso con las razones de tu boca.

Proverbios 12:13

El impío es enredado en la prevaricación de sus labios; mas el justo saldrá de la tribulación.

Isaías 8:15

Y muchos tropezarán entre ellos, y caerán, y serán quebrantados; se enredarán, y serán apresados.

Isaías 28:13

La palabra, pues, de Jehová les será mandamiento tras mandamiento, mandato sobre mandato, renglón tras renglón, línea sobre línea, un poquito allí, otro poquito allá; para que vayan y caigan de espaldas, y sean quebrantados, y enlazados, y presos.

Tesoro del Conocimiento Bíblico no añadido

Reina Valera Gómez (© 2010)