12 Versículos de la Biblia sobre Argumento razonado

Pero quiero hablar al Todopoderoso, y deseo argumentar con Dios.

Aunque El me mate, en El esperaré; pero defenderé mis caminos delante de El.

Expondría ante El {mi} causa, llenaría mi boca de argumentos.

Oíd, os ruego, mi razonamiento, y prestad atención a los argumentos de mis labios.

Venid ahora, y razonemos --dice el SEÑOR-- aunque vuestros pecados sean como la grana, como la nieve serán emblanquecidos; aunque sean rojos como el carmesí, como {blanca} lana quedarán.

Pero estaban allí sentados algunos de los escribas, los cuales pensaban en sus corazones:

Y al instante Jesús, conociendo en su espíritu que pensaban de esa manera dentro de sí mismos, les dijo*: ¿Por qué pensáis estas cosas en vuestros corazones?

También hablaba y discutía con los {judíos} helenistas; mas éstos intentaban matarlo.

¿Dónde está el sabio? ¿Dónde el escriba? ¿Dónde el polemista de este siglo? ¿No ha hecho Dios que la sabiduría de este mundo sea necedad?

Pues aunque conocían a Dios, no le honraron como a Dios ni {le} dieron gracias, sino que se hicieron vanos en sus razonamientos y su necio corazón fue entenebrecido.

Y también: EL SEÑOR CONOCE LOS RAZONAMIENTOS de los sabios, LOS CUALES SON INUTILES.

Cuando yo era niño, hablaba como niño, pensaba como niño, razonaba como niño; {pero} cuando llegué a ser hombre, dejé las cosas de niño.