48 Versículos de la Biblia sobre Duda, tratar
Versículos Más Relevantes
Estas cosas he escrito a vosotros que creéis en el Nombre del Hijo de Dios; para que sepáis que tenéis vida eterna, y para que creáis en el Nombre del Hijo de Dios.
Susténtame conforme a tu palabra, y viviré; y no me frustres de mi esperanza.
Y he aquí, yo soy contigo, y yo te guardaré por dondequiera que fueres, y yo te volveré a esta tierra; porque no te dejaré hasta tanto que haya hecho lo que te he dicho.
Estas empero son escritas, para que creáis que Jesús es el Cristo, Hijo de Dios; y para que creyendo, tengáis vida en su nombre.
Y él le respondió: Porque yo seré contigo; y esto te será por señal de que yo te he enviado: luego que hubieres sacado este pueblo de Egipto, serviréis a Dios sobre este monte.
Porque las cosas que antes fueron escritas, para nuestra enseñanza fueron escritas; para que por el padecer con paciencia, y por la consolación de las Escrituras, tengamos esperanza.
Cuando salieres a la guerra contra tus enemigos, y vieres caballos y carros, un pueblo más grande que tú, no tengas temor de ellos, que el SEÑOR tu Dios es contigo, el cual te sacó de tierra de Egipto.
que ya no seamos niños inconstantes, y seamos atraídos a todo viento de doctrina por maldad de hombres que engañan con astutos errores;
Tenemos también la palabra de los profetas más firme, a la cual hacéis bien de estar atentos como a una lámpara que alumbra en lugar oscuro, hasta que el día esclarezca, y el lucero de la mañana salga en vuestros corazones.
y dijo: Oíd, Judá todo, y vosotros moradores de Jerusalén, y tú, rey Josafat, el SEÑOR os dice así: No temáis ni os amedrentéis delante de esta tan grande multitud; porque no es vuestra la guerra, sino de Dios. Mañana descenderéis contra ellos; he aquí que ellos subirán por la cuesta de Sis, y los hallaréis junto al arroyo, antes del desierto de Jeruel. No habrá para qué vosotros peleéis ahora; paraos, estad quedos , y ved la salud del SEÑOR con vosotros. Oh Judá y Jerusalén, no temáis ni desmayéis; salid mañana contra ellos, que el SEÑOR será con vosotros.
Oh Timoteo, guarda lo que se te ha encomendado, y apartase de las voces profanas de vanas cosas, y los argumentos del vano nombre de ciencia; la cual pretendiendo muchos, fueron descaminados acerca de la fe. La Gracia sea contigo. Amén.
Permanesca tú en lo que has aprendido y en lo que te ha sido encargado, sabiendo de quién has aprendido; y que sabes las Sagradas Escrituras desde la niñez, las cuales te pueden hacer sabio para la salud por la fe que es en Cristo Jesús. Toda Escritura es inspirada divinamente y es útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instituir en justicia,Leer más.
para que el hombre de Dios sea perfecto, perfectamente equipado para toda buena obra.
¿Por qué te abates, oh alma mía, y por qué bramas contra mí? Espera a Dios; quien es la salud de mi rostro, y el Dios mío.
Con todo, yo siempre estuve contigo; trabaste de mi mano derecha. Me has guiado según tu consejo, y después me recibirás con gloria. ¿A quién tengo yo en los cielos sino a ti ? Y fuera de ti nada deseo en la tierra.Leer más.
Mi carne y mi corazón desfallecen; la fuerza de mi corazón es que mi porción es Dios para siempre.
La exposición de tus palabras alumbra; hace entender a los simples.
Mas las cuestiones locas, y las genealogías, y contenciones, y debates acerca de la ley, evita; porque son sin provecho y vanas.
No temas, que yo soy contigo; no desmayes, que yo soy tu Dios, que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.
Porque el mandamiento es candela, y la enseñanza luz; y camino de vida las reprensiones del castigo;
Y dije: Enfermedad mía es ésta ; me acordaré de los años de la diestra del Altísimo, me acordaba de las obras de JAH; por tanto me acordé de tus maravillas antiguas. Y meditaba en todas tus obras, y hablaba de tus hechos.Leer más.
Oh Dios, en santidad es tu camino: ¿Qué Dios grande como el Dios nuestro ? Tú eres el Dios que hace maravillas; tú hiciste notoria en los pueblos tu fortaleza. Con tu brazo redimiste a tu pueblo, a los hijos de Jacob y de José. (Selah.) Te vieron las aguas, oh Dios; te vieron las aguas, temieron; y temblaron los abismos. Las nubes echaron inundaciones de aguas; tronaron los cielos, y discurrieron tus rayos. Anduvo en derredor el sonido de tus truenos; los relámpagos alumbraron el mundo; la tierra se estremeció y tembló. En el mar fue tu camino, y tus sendas en las muchas aguas; y tus pisadas no fueron conocidas. Condujiste a tu pueblo como ovejas, por mano de Moisés y de Aarón.
Entonces él miró, y he aquí a su cabecera una torta cocida sobre las ascuas, y un vaso de agua; y comió y bebió y se volvió a dormir. Y volviendo el ángel del SEÑOR la segunda vez, le tocó, diciendo: Levántate, come; porque gran camino te resta. Se levantó, pues , y comió y bebió; y caminó con la fortaleza de aquella comida cuarenta días y cuarenta noches, hasta el monte de Dios, Horeb.
Y estas cosas les acontecieron como figura; y son escritas para nuestra amonestación, en quien los fines de los siglos ha parado.
Cuando dijeres en tu corazón: Aquellos gentiles son muchos más que yo, ¿cómo los podré desarraigar? No tengas temor de ellos; acuérdate bien de lo que hizo el SEÑOR tu Dios con Faraón y con todo Egipto; de las grandes pruebas que vieron tus ojos, y de las señales y milagros, y de la mano fuerte y brazo extendido con que el SEÑOR tu Dios te sacó; así hará el SEÑOR tu Dios con todos los pueblos de cuya presencia tú temieres.
¿No has sabido? ¿No has oído que el Dios del siglo es el SEÑOR, el cual creó los términos de la tierra? No se trabaja, ni se fatiga con cansancio; y su entendimiento no hay quien lo alcance. El da esfuerzo al cansado, y multiplica las fuerzas al que no tiene ningunas. Los jóvenes se fatigan, y se cansan; los niños flaquean y caen;Leer más.
pero los que esperan al SEÑOR tendrán nuevas fuerzas; levantarán las alas, como las águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán, y no se fatigarán.
Confesad al SEÑOR, invocad su nombre, haced notorias en los pueblos sus obras. Cantad a él, cantadle salmos; hablad de todas sus maravillas. Gloriaos en su santo nombre; alégrese el corazón de los que buscan al SEÑOR.Leer más.
Buscad al SEÑOR y su fortaleza; buscad su rostro continuamente. Haced memoria de sus maravillas que ha obrado, de sus prodigios, y de los juicios de su boca,
Cuando pasares por las aguas, yo seré contigo; y en los ríos, no te anegarán. Cuando pasares por el fuego, no te quemarás, ni la llama arderá en ti.
Alabad al SEÑOR, invocad su Nombre; haced notorias sus obras en los pueblos. Cantadle, decid salmos a él; hablad de todas sus maravillas. Gloriaos en su Nombre santo; alégrese el corazón de los que buscan al SEÑOR.Leer más.
Buscad al SEÑOR, y su fortaleza; buscad su rostro siempre. Acordaos de sus maravillas que hizo, de sus prodigios y de los juicios de su boca, oh vosotros , simiente de Abraham su siervo, hijos de Jacob, sus escogidos.
Yo buscaré la perdida, y tornaré la amontada, y ligaré la perniquebrada, y fortaleceré la enferma; mas a la gruesa y a la fuerte destruiré. Yo las apacentaré en juicio.
En ti esperaron nuestros padres; esperaron, y tú los salvaste. Clamaron a ti, y fueron librados; esperaron en ti, y no se avergonzaron.
No acabará de quebrar la caña cascada, ni apagará el pábilo que humeare; sacará el juicio a verdad.
Pero Dios es mi rey ya de antiguo; el que obra salud en medio de la tierra. Tú hendiste el mar con tu fortaleza; quebrantaste las cabezas de los dragones en las aguas. Tú magullaste las cabezas del leviatán; lo diste por comida al pueblo de los desiertos.Leer más.
Tú abriste fuente y río; tú secaste ríos impetuosos. Tuyo es el día, tuya también es la noche; tú aparejaste la lumbre y el sol. Tú estableciste todos los términos de la tierra; el verano y el invierno tú los formaste.
Me acordé de los días antiguos; meditaba en todas tus obras, meditaba en las obras de tus manos.
Entonces dijo Moisés: Seiscientos mil de a pie es el pueblo en medio del cual yo estoy; y tú dices: ¡Les daré carne, y comerán el tiempo de un mes! ¿Se degollarán para ellos ovejas y bueyes que les basten? ¿o se juntarán para ellos todos los peces del mar para que tengan abasto? Entonces el SEÑOR respondió a Moisés: ¿Se ha acortado la mano del SEÑOR? Ahora verás si te sucede mi dicho, o no.
Acordaos de las cosas pasadas desde el siglo, porque yo soy Dios, y no hay más Dios; y nada hay a mí semejante.
Mas Gedeón dijo a Dios: No se encienda tu ira contra mí, si aún hablare esta vez; solamente probaré ahora otra vez con el vellón. Te ruego que la sequedad sea sólo en el vellón, y el rocío sobre la tierra. Y aquella noche lo hizo Dios así; porque la sequedad fue sólo en el vellón, y en toda la tierra estuvo el rocío.
¿No entendéis aún, ni os acordáis de los cinco panes de los cinco mil hombres , y cuántos cestos alzasteis? ¿Ni de los siete panes de los cuatro mil, y cuántas canastas tomasteis?
Luego dice a Tomás: Mete tu dedo aquí, y ve mis manos; y alarga acá tu mano, y métela en mi costado; y no seas incrédulo, sino fiel.
Y este día os ha de ser en memoria, y habéis de celebrarlo como fiesta solemne al SEÑOR por vuestras edades; por estatuto perpetuo lo celebraréis.
Al enfermo en la fe sobrellevad, pero no hasta discernimientos dudosos. Porque alguno cree que se ha de comer de todas las cosas; otro enfermo, come legumbres. El que come, no menosprecie al que no come; y el que no come, no juzgue al que come; porque Dios le ha levantado.Leer más.
¿Tú quién eres que juzgas al siervo ajeno? Por su señor está en pie, o cae; y si cae se afirmará; que poderoso es el Señor para afirmarle.
Guardarás el mes (de Abib ) de los nuevos frutos, y harás pascua al SEÑOR tu Dios; porque en el mes de los nuevos frutos te sacó el SEÑOR tu Dios de Egipto de noche.
Así que, los que somos más firmes, debemos sobrellevar las flaquezas de los flacos, y no agradarnos a nosotros mismos.
Y tomando el pan, habiendo dado gracias, partió, y les dio, diciendo: Esto es mi cuerpo, que por vosotros es dado; haced esto en memoria de mí.
Mas reanimándose el pueblo, los varones de Israel volvieron a ordenar la batalla en el mismo lugar donde la habían ordenado el primer día.
y habiendo dado gracias, lo partió, y dijo: Tomad, comed; esto es mi cuerpo que por vosotros es partido; haced esto en memoria de mí. Asimismo tomó también la copa, después de haber cenado, diciendo: Esta copa es el Nuevo testamento en mi sangre; haced esto todas las veces que bebiereis, en memoria de mí.
He aquí, tú enseñabas a muchos, y las manos flacas corroborabas. Al que vacilaba, enderezaban tus palabras, y las rodillas de los que arrodillaban esforzabas.
Y respondiendo Jesús, les dijo: Id, y haced saber a Juan las cosas que oís y veis: Los ciegos ven, y los cojos andan; los leprosos son limpiados, y los sordos oyen; los muertos son resucitados, y el evangelio es predicado a los pobres. Y bienaventurado es el que no fuere escandalizado en mí.
Y puso capitanes de guerra sobre el pueblo, y los hizo reunir así en la plaza de la puerta de la ciudad, y les habló al corazón de ellos, diciendo: Esforzaos y confortaos; no temáis, ni hayáis miedo del rey de Asiria, ni de toda su multitud que con él viene ; porque más son con nosotros que con él. Con él es el brazo de carne, mas con nosotros el SEÑOR nuestro Dios para ayudarnos, y pelear nuestras batallas. Y se afirmó el pueblo sobre las palabras de Ezequías rey de Judá.