20 Versículos de la Biblia sobre Estudio
Versículos Más Relevantes
Hijo mío, si recibieres mis palabras, y mis mandamientos atesorares dentro de ti, de manera que inclines tu oído a la sabiduría, y apliques tu corazón a la prudencia; Si clamares a la inteligencia, y a la prudencia alzares tu voz;Leer más.
Si como a la plata la buscares, y la procurares como a tesoros escondidos; Entonces entenderás el temor de Jehová, y hallarás el conocimiento de Dios.
Adquiere sabiduría, adquiere inteligencia; no te olvides ni te apartes de las palabras de mi boca:
Mas ¿dónde se hallará la sabiduría? ¿Y dónde está el lugar de la inteligencia?
Enséñanos de tal modo a contar nuestros días, que traigamos al corazón sabiduría.
El corazón entendido busca la sabiduría; mas la boca de los necios se alimenta de necedades.
Estudia con diligencia para presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué avergonzarse, que traza bien la palabra de verdad.
¡A la ley y al testimonio! Si no dijeren conforme a esto, es porque no les ha amanecido.
Se hallaron tus palabras, y yo las comí; y tus palabras fueron para mí el gozo y la alegría de mi corazón; porque tu nombre se invocó sobre mí, oh Jehová Dios de los ejércitos.
Entonces respondiendo Jesús, les dijo: Erráis, no conociendo las Escrituras, ni el poder de Dios.
Porque las cosas que antes fueron escritas, para nuestra enseñanza fueron escritas; para que por la paciencia y consolación de las Escrituras, tengamos esperanza.
desead, como niños recién nacidos, la leche no adulterada de la palabra, para que por ella crezcáis;
Porque Esdras había preparado su corazón para inquirir la ley de Jehová, y para hacer y enseñar a Israel mandamientos y juicios.
Y éstos eran más nobles que los que estaban en Tesalónica, pues recibieron la palabra con toda solicitud, escudriñando cada día las Escrituras para ver si estas cosas eran así.
Escudriñad las Escrituras; porque a vosotros os parece que en ellas tenéis la vida eterna; y ellas son las que dan testimonio de mí.
Mas el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, Él os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que yo os he dicho.
Pero cuando el Espíritu de verdad venga, Él os guiará a toda verdad; porque no hablará de sí mismo, sino que hablará todo lo que oiga, y os hará saber las cosas que han de venir.