35 Versículo de la Biblia sobre la imaginación

destruyendo consejos, y toda altura que se levanta contra la ciencia de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia del Cristo.

Y dijo el SEÑOR: He aquí el pueblo es uno, y todos éstos tienen un lenguaje; y ahora comienzan a hacer, y ahora no dejarán de efectuar todo lo que han pensando hacer.

antes, como está escrito: Lo que ojo no vio, ni oreja oyó, ni ha subido en corazón de hombre, es lo que Dios ha preparado para aquellos que le aman.

porque habiendo conocido a Dios, no le glorificaron como a Dios, ni le dieron gracias; antes se desvanecieron en sus fantasías, y el tonto corazón de ellos fue entenebrecido.

Y vio el SEÑOR que la malicia de los hombres era mucha sobre la tierra, y que todo el intento de los pensamientos del corazón de ellos ciertamente era malo todo el tiempo.

Siendo pues linaje de Dios, no hemos de estimar la Divinidad ser semejante a oro, o a plata, o a piedra, con la marca de artificio o de imaginación de hombres.

Y no oyeron ni inclinaron su oído; antes caminaron en sus consejos, en la dureza de su corazón malvado, y fueron hacia atrás y no hacia adelante,

Y a Aquel que es poderoso para hacer todas las cosas mucho más abundantemente de lo que pedimos o entendemos, por la potencia que obra en nosotros,

Y dijeron: Es por demás: porque en pos de nuestras imaginaciones hemos de ir, y hemos de hacer cada uno el pensamiento de su malvado corazón.

SEÑOR, Dios de Abraham, de Isaac, y de Israel, nuestros padres, conserva perpetuamente esta voluntad en los pensamientos del corazón de tu pueblo, y encamina su corazón a ti.

Los dejé por tanto a la dureza de su corazón; caminaron en sus consejos.

antes se fueron tras la imaginación de su corazón, y en pos de los baales que les enseñaron sus padres;

el corazón que maquina pensamientos inicuos, los pies presurosos para correr al mal,

Las riquezas del rico son la ciudad de su fortaleza, y como un muro alto en su imaginación.

Dicen atrevidamente a los que me aíran: El SEÑOR dijo: Paz tendréis; y a cualquiera que anda tras la imaginación de su corazón, dijeron: No vendrá mal sobre vosotros.

Sus ojos están salidos de gruesos; logran con creces los antojos del corazón.

He aquí, Dios es grande, y nosotros no le conocemos; ni se puede rastrear el número de sus años.

Resh: Tú has visto toda su venganza; todos sus pensamientos contra mí.

Así dijo el SEÑOR de los ejércitos: No escuchéis las palabras de los profetas que os profetizan; os hacen desvanecer; hablan visión de su corazón, no de la boca del SEÑOR.

He aquí, yo conozco vuestros pensamientos, y las imaginaciones que contra mí forjáis.

Tú le guardarás en completa paz, cuyo pensamiento en ti persevera; porque en ti ha confiado.

Hizo valentía con su brazo; esparció los soberbios del pensamiento de su corazón.

Entendiendo primero esto, que ninguna profecía de la Escritura es de particular interpretación;

Teniendo el entendimiento entenebrecido, ajenos de la vida de Dios por la ignorancia que en ellos hay, por la ceguedad de su corazón;

Hijo de hombre, profetiza contra los profetas de Israel que profetizan, y di a los que profetizan de su propio corazón: Oíd palabra del SEÑOR.

Porque tendieron mal contra ti; fraguaron maquinaciones, mas no prevalecieron.

Con arrogancia el malo persigue al pobre; sean tomados en los pensamientos que pensaron.

Entonces envié yo a decirle: No hay tal cosa como dices, sino que de tu corazón tú lo inventas.

Extendí mis manos todo el día a pueblo rebelde, el cual anda por camino no bueno, en pos de sus pensamientos;

Así dijo el Señor DIOS: ¡Ay de los profetas insensatos, que andan en pos de su propio espíritu, y nada vieron!

y vosotros habéis hecho peor que vuestros padres; porque he aquí que vosotros camináis cada uno tras la imaginación de su malvado corazón, no oyéndome a mí.

Porque mis pensamientos no son como vuestros pensamientos; ni vuestros caminos, como mis caminos, dijo el SEÑOR.

Y tú, Salomón, hijo mío, conoce al Dios de tu padre, y sírvele de corazón perfecto, y de ánimo voluntario; porque el SEÑOR escudriña los corazones de todos, y entiende toda imaginación de los pensamientos. Si tú le buscares, lo hallarás; mas si le dejares, él te desechará para siempre.