32 Versículos de la Biblia sobre La monogamia
Versículos Más Relevantes
Y de la costilla que Jehová Dios tomó del hombre, hizo una mujer, y la trajo al hombre. Y dijo Adán: Ésta es ahora hueso de mis huesos, y carne de mi carne; ella será llamada Varona, porque del varón fue tomada. Por tanto, dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su esposa, y serán una sola carne.
¿No hizo Él uno, aunque tenía el remanente del espíritu? ¿Y por qué uno? Para que procurara una simiente de Dios. Guardaos, pues, en vuestro espíritu, y no seáis desleales contra la esposa de vuestra juventud.
Él respondiendo, les dijo: ¿No habéis leído que el que los hizo al principio, varón y hembra los hizo? Y dijo: Por esto dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su esposa, y los dos serán una sola carne. Así que no son ya más dos, sino una sola carne. Por tanto, lo que Dios unió, no lo separe el hombre.
pero al principio de la creación, varón y hembra los hizo Dios. Por esto dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su esposa; y los dos serán una sola carne; así que no son ya más dos, sino una carne.Leer más.
Por tanto, lo que Dios unió, no lo separe el hombre.
Por esto, dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su esposa, y los dos serán una sola carne.
Y cuando pasé yo junto a ti, y te miré, he aquí que tu tiempo era tiempo de amores; y extendí mi manto sobre ti, y cubrí tu desnudez; y te hice juramento, y entré en pacto contigo y fuiste mía, dice Jehová el Señor.
Porque tu marido es tu Hacedor; Jehová de los ejércitos es su nombre; y tu Redentor, el Santo de Israel; Dios de toda la tierra será llamado. Porque como a mujer abandonada y triste de espíritu te llamó Jehová, y como a la esposa de la juventud que es repudiada, dice el Dios tuyo. Por un breve momento te dejé; mas te recogeré con grandes misericordias.Leer más.
Con un poco de ira escondí mi rostro de ti por un momento; mas con misericordia eterna tendré compasión de ti, dice tu Redentor Jehová.
Anda, y clama a los oídos de Jerusalén, diciendo: Así dice Jehová: Me he acordado de ti, de la lealtad de tu juventud, del amor de tu desposorio, cuando andabas en pos de mí en el desierto, en tierra no sembrada. Santidad era Israel a Jehová, primicias de sus nuevos frutos. Todos los que le devoran injuriarán; mal vendrá sobre ellos, dice Jehová.
Y será que en aquel tiempo, dice Jehová, me llamarás Ishi, y nunca más me llamarás Baali. Porque quitaré de su boca los nombres de los Baales, y nunca más serán mencionados por sus nombres. Y en aquel tiempo haré para ellos pacto con las bestias del campo, con las aves del cielo y con los reptiles de la tierra; y quebraré arco y espada y la batalla de la tierra, y los haré dormir seguros.Leer más.
Y te desposaré conmigo para siempre; te desposaré conmigo en justicia, y juicio, en compasión, y en misericordias. Y te desposaré conmigo en fe, y conocerás a Jehová.
Y me dijo otra vez Jehová: Ve, ama una mujer amada de su compañero (aunque adúltera), como el amor de Jehová para con los hijos de Israel; los cuales miran a dioses ajenos, y aman frascos de vino.
Este misterio grande es; mas yo hablo en cuanto a Cristo y a la iglesia. Por lo demás, cada uno de vosotros en particular, ame también a su esposa como a sí mismo; y la esposa reverencie a su marido.
porque eres pueblo santo a Jehová tu Dios, y Jehová te ha escogido para que le seas un pueblo singular de entre todos los pueblos que están sobre la faz de la tierra.
A vosotros solamente he conocido de todas las familias de la tierra; por tanto visitaré contra vosotros todas vuestras maldades.
Ahora pues, si obedeciereis mi voz, y guardareis mi pacto, vosotros seréis mi especial tesoro sobre todos los pueblos; porque mía es toda la tierra. Y vosotros me seréis un reino de sacerdotes, y nación santa. Éstas son las palabras que dirás a los hijos de Israel.
Y Jehová te ha proclamado hoy para que le seas su peculiar pueblo como Él te lo había prometido; para que guardes todos sus mandamientos,
Cuando el Altísimo dio a las naciones su herencia, cuando separó a los hijos de los hombres, estableció los términos de los pueblos según el número de los hijos de Israel.
Y dijo Jehová Dios: No es bueno que el hombre esté solo; le haré ayuda idónea para él.
Bebe el agua de tu cisterna, y los raudales de tu propio pozo. ¿Se han de derramar afuera tus fuentes, y tus corrientes de aguas por las calles? Sean para ti solo, y no para los extraños contigo.Leer más.
Sea bendito tu manantial; y alégrate con la esposa de tu juventud. Como cierva amada y graciosa gacela, sus pechos te satisfagan en todo tiempo; y en su amor recréate siempre.
Mas diréis: ¿Por qué? Porque Jehová ha sido testigo entre ti y la esposa de tu juventud, contra la cual tú has sido desleal, aun siendo ella tu compañera y la esposa de tu pacto.
Y si un hombre tuviere dos esposas, una amada y otra aborrecida, y la amada y la aborrecida le dieren hijos, y el hijo primogénito fuere de la aborrecida;
Y entró también a Raquel; y la amó también más que a Lea: y sirvió con él aún otros siete años.
Hubo un varón de Ramataim de Sofim, del monte de Efraín, que se llamaba Elcana, hijo de Jeroham, hijo de Eliú, hijo de Tohu, hijo de Zuf, efrateo. Y tenía él dos esposas; el nombre de una era Ana, y el nombre de la otra Penina. Y Penina tenía hijos, mas Ana no los tenía. Y subía aquel varón todos los años de su ciudad, para adorar y ofrecer sacrificios a Jehová de los ejércitos en Silo, donde estaban dos hijos de Elí, Ofni y Finees, sacerdotes de Jehová.Leer más.
Y cuando venía el día en que Elcana ofrecía sacrificio, daba porciones a Penina su esposa y a todos sus hijos y a todas sus hijas. Mas a Ana daba una porción escogida; porque amaba a Ana, aunque Jehová había cerrado su matriz. Y su adversaria la irritaba, enojándola y entristeciéndola, porque Jehová había cerrado su matriz. Y así hacía cada año; cuando subía a la casa de Jehová, enojaba así a la otra; por lo cual ella lloraba, y no comía. Y Elcana su marido le dijo: Ana, ¿por qué lloras? ¿Y por qué no comes? ¿Y por qué está afligido tu corazón? ¿No te soy yo mejor que diez hijos?
Mas Roboam amó a Maaca hija de Absalón sobre todas sus esposas y concubinas; porque tomó dieciocho esposas y sesenta concubinas, y engendró veintiocho hijos y sesenta hijas. Y puso Roboam a Abías hijo de Maaca por cabeza y príncipe de sus hermanos, porque quería hacerle rey.
Y yo os digo: Cualquiera que repudiare a su esposa, a no ser por causa de fornicación, y se casare con otra, adultera; y el que se casare con la repudiada, adultera.
Y Él les dijo: Cualquiera que se divorcia de su esposa y se casa con otra, comete adulterio contra ella;
Cualquiera que repudia a su esposa, y se casa con otra, comete adulterio; y el que se casa con la repudiada del marido, comete adulterio.
Mas para evitar fornicaciones, cada varón tenga su propia esposa, y cada mujer tenga su propio marido. El marido pague a su esposa la debida benevolencia; y asimismo la esposa a su marido. La esposa no tiene potestad de su propio cuerpo, sino el marido; e igualmente tampoco el marido tiene potestad de su propio cuerpo, sino la esposa.
Los diáconos sean maridos de una sola esposa, que gobiernen bien sus hijos y sus casas.
Pero es necesario que el obispo sea irreprensible, marido de una sola esposa, vigilante, templado, decoroso, hospedador, apto para enseñar;
el que fuere irreprensible, marido de una esposa, que tenga hijos fieles, que no estén acusados de disolución, o rebeldía.