33 Versículos de la Biblia sobre la competencia

Y aun también el que compete en juegos públicos , no es coronado si no hubiere competido legítimamente.

Y todo aquel que lucha, en todo demuestra templanza; y ellos, a la verdad, para recibir una corona corruptible; mas nosotros, una incorruptible.

¿No sabéis que los que corren en el estadio, todos a la verdad corren, mas uno lleva el premio? Corred pues de tal manera que lo toméis.

Y algunos, a la verdad, predican al Cristo por envidia y porfía; mas otros también por buena voluntad.

Porque no osamos entremeternos o compararnos con algunos que se encomiendan a sí mismos; mas no entienden que ellos, consigo mismos se miden, y a sí mismos se comparan.

Todavía, hermanos, os ruego por el Nombre del Señor nuestro, Jesús, el Cristo, que habléis todos una misma cosa, y que no haya entre vosotros divisiones, antes seáis perfectos, unidos en un mismo entendimiento y en un mismo parecer.

Prueba, ahora, con tus siervos diez días, y dennos de las legumbres a comer, y agua a beber.

pero los otros por caridad, sabiendo que soy puesto en ellas por la defensa del Evangelio.

Y el rey amó a Ester sobre todas las mujeres, y halló gracia y misericordia delante de él más que todas las vírgenes; y puso la corona del reino en su cabeza, y la hizo reina en lugar de Vasti.

De más estima es la buena fama que las muchas riquezas; y la buena gracia más que la plata y el oro.

Entonces Elías dijo a los profetas de Baal: Escogeos un buey, y haced primero, pues que vosotros sois los más; e invocad en el nombre de vuestros dioses, mas no pongáis fuego debajo.

Mas a los que son contenciosos, y que no obedecen a la verdad, antes obedecen a la injusticia: enojo e ira.

Y considerémonos los unos a los otros para provocarnos a la caridad, y a las buenas obras;

He visto asimismo que todo trabajo y toda rectitud de obras mueve la envidia del hombre contra su prójimo. También esto es vanidad y aflicción de espíritu.

amando la caridad de la hermandad los unos con los otros; previniéndoos con honra los unos a los otros;

Andad, y clamad a los dioses que os habéis elegido, que os libren en el tiempo de vuestra aflicción.

Porque donde hay envidia y contención, allí hay perturbación, y toda obra perversa.

Porque temo que cuando llegare, no os halle tales como quiero, y yo sea hallado de vosotros cual no queréis; para que por ventura no haya entre vosotros contiendas, envidias, iras, disensiones, detracciones, murmuraciones, rumores, bandos;

Hay quienes reparten, y les es añadido más; y hay quienes retienen más de lo que es justo, mas vienen a pobreza.

No tomarás mujer juntamente con su hermana, para hacerla su rival, descubriendo su desnudez delante de ella en su vida.

Y a estos cuatro muchachos les dio Dios conocimiento e inteligencia en todas las letras y ciencia; mas Daniel tuvo entendimiento en toda visión y sueños.

Y quitaron de entre sí los dioses ajenos, y sirvieron al SEÑOR; y su alma fue angustiada a causa del trabajo de Israel.

Y todos los que creían estaban juntos; y tenían todas las cosas comunes;

Esforzaos y esfuércese vuestro corazón todos los que esperáis en el SEÑOR.

Que aún no me ha concedido que tome mi aliento; mas me ha llenado de amarguras.

Si alguno viene a mí, y no aborrece a su padre, y madre, y mujer, e hijos, y hermanos, y hermanas, y aun también su vida, no puede ser mi discípulo.

Mas vosotros me habéis dejado, y habéis servido a dioses ajenos; por tanto, yo no os libraré más.

Y el SEÑOR respondió a los hijos de Israel: ¿No habéis sido oprimidos de Egipto, de los amorreos, de los amonitas, de los filisteos,

Y los hijos de Israel respondieron al SEÑOR: Hemos pecado; haz tú con nosotros como bien te pareciere; solamente que ahora nos libres en este día.

Y habló Dios todas estas palabras, diciendo:

Y en esto doy mi consejo; porque esto os conviene a vosotros, que comenzasteis, no sólo a hacerlo, sino también a ser solícitos desde el año pasado.

YO SOY el pan vivo que he descendido del cielo; si alguno comiere de este pan, vivirá para siempre; y el pan que yo daré es mi carne, la cual yo daré por la vida del mundo.

Y los príncipes y el pueblo de Galaad dijeron el uno al otro: ¿Quién será el que comenzará la batalla contra los hijos de Amón? El será cabeza sobre todos los que habitan en Galaad.