43 Versículos de la Biblia sobre la oración durante tiempos difíciles

orad sin cesar;

Por eso, que todo santo ore a ti en el tiempo en que puedas ser hallado; ciertamente, en la inundación de muchas aguas, no llegarán {éstas} a él.

Para el director del coro. {Salmo} de los hijos de Coré, compuesto para Alamot. Cántico.Dios es nuestro refugio y fortaleza, {nuestro} pronto auxilio en las tribulaciones.

No serán avergonzados en el tiempo malo, y en días de hambre se saciarán.

¿Sufre alguno entre vosotros? Que haga oración. ¿Está alguno alegre? Que cante alabanzas.

Pero yo cantaré de tu poder; sí, gozoso cantaré por la mañana tu misericordia; porque tú has sido mi baluarte, y un refugio en el día de mi angustia.

Con toda oración y súplica orad en todo tiempo en el Espíritu, y así, velad con toda perseverancia y súplica por todos los santos;

e invócame en el día de la angustia; yo te libraré, y tú me honrarás.

Esto os dará oportunidad de testificar.

De día mandará el SEÑOR su misericordia, y de noche su cántico {estará} conmigo; {elevaré} una oración al Dios de mi vida.

Mas velad en todo tiempo, orando para que tengáis fuerza para escapar de todas estas cosas que están por suceder, y podáis estar en pie delante del Hijo del Hombre.

En el día que invoqué, me respondiste; me hiciste valiente con fortaleza en mi alma.

Si eres débil en día de angustia, tu fuerza es limitada.

Confiad en El en todo tiempo, oh pueblo; derramad vuestro corazón delante de El; Dios es nuestro refugio. (Selah)

teniendo presente sin cesar delante de nuestro Dios y Padre vuestra obra de fe, vuestro trabajo de amor y la firmeza de vuestra esperanza en nuestro Señor Jesucristo;

En medio de {mi} angustia invoqué al SEÑOR; el SEÑOR me respondió {y me puso} en un lugar espacioso.

no seáis perezosos en {lo que requiere} diligencia; fervientes en espíritu, sirviendo al Señor,

Pero ninguno dice: `` ¿Dónde está Dios mi Hacedor, que inspira cánticos en la noche,

Velad y orad para que no entréis en tentación; el espíritu está dispuesto, pero la carne es débil.

Y los apóstoles dijeron al Señor: ¡Auméntanos la fe!

Pero, ¡ay de las que estén encinta y de las que estén criando en aquellos días!

Orad para que vuestra huida no suceda en invierno, ni en día de reposo,

Exhorto, pues, ante todo que se hagan rogativas, oraciones, peticiones {y} acciones de gracias por todos los hombres;

Alégrate en el día de la prosperidad, y en el día de la adversidad considera: Dios ha hecho tanto el uno como el otro para que el hombre no descubra nada {que suceda} después de él.

¿No he llorado por aquél cuya vida es difícil? ¿No se angustió mi alma por el necesitado?

dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para vosotros en Cristo Jesús.

Pero Ana respondió y dijo: No, señor mío, soy una mujer angustiada en espíritu; no he bebido vino ni licor, sino que he derramado mi alma delante del SEÑOR.

Que viva, pues, y se le dé del oro de Sabá, y que se ore por él continuamente; que todo el día se le bendiga.

¿Está alguno entre vosotros enfermo? Que llame a los ancianos de la iglesia y que ellos oren por él, ungiéndolo con aceite en el nombre del Señor;

porque habrá entonces una gran tribulación, tal como no ha acontecido desde el principio del mundo hasta ahora, ni acontecerá jamás.

Pero debes saber esto: que en los últimos días vendrán tiempos difíciles.

el cual nos consuela en toda tribulación nuestra, para que nosotros podamos consolar a los que están en cualquier aflicción con el consuelo con que nosotros mismos somos consolados por Dios.

``Clama a mí, y yo te responderé y te revelaré cosas grandes e inaccesibles, que tú no conoces."

Y estando en agonía, oraba con mucho fervor; y su sudor se volvió como gruesas gotas de sangre, que caían sobre la tierra.

Todos éstos estaban unánimes, entregados de continuo a la oración junto con las mujeres, y {con} María la madre de Jesús, y con los hermanos de El.

Pero vosotros, amados, edificándoos en vuestra santísima fe, orando en el Espíritu Santo,

también yo me reiré de vuestra calamidad, me burlaré cuando sobrevenga lo que teméis,

Como a medianoche, Pablo y Silas oraban y cantaban himnos a Dios, y los presos los escuchaban.

Mas el fin de todas las cosas se acerca; sed pues prudentes y de {espíritu} sobrio para la oración.

todavía estaba yo hablando en oración, cuando Gabriel, el hombre a quien había visto en la visión al principio, se me acercó, estando yo muy cansado, como a la hora de la ofrenda de la tarde.

Tomad también el YELMO DE LA SALVACION, y la espada del Espíritu que es la palabra de Dios.

Muchos tropezarán entonces {y caerán}, y se traicionarán unos a otros, y unos a otros se odiarán.

He aquí, yo soy el SEÑOR, el Dios de toda carne, ¿habrá algo imposible para mí?