'Con' en la Biblia
revelar a su Hijo en mí, para que le predicara entre los gentiles, luego no consulté con carne y sangre;
Después, pasados tres años, fui a Jerusalén a ver a Pedro, y estuve con él quince días.
Después, pasados catorce años, fui otra vez a Jerusalén juntamente con Bernabé, tomando también conmigo a Tito.
a los cuales ni aun por una hora accedimos a someternos, para que la verdad del Evangelio permaneciera con vosotros.
(porque el que obró en Pedro para el apostolado de la circuncisión, obró también en mí para con los gentiles);
Porque antes que vinieran unos de parte de Jacobo, comía con los gentiles; mas después que vinieron, se retraía y apartaba, teniendo miedo de los que eran de la circuncisión.
Con Cristo estoy juntamente colgado en el madero, y vivo, no ya yo, sino vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo por la fe del Hijo de Dios, el cual me amó, y se entregó a sí mismo por mí.
Luego los de la fe son los benditos con el creyente Abraham.
Además por la ley ninguno se justifica para con Dios, queda manifiesto: Que el justo por la fe vivirá.
Esto pues digo: Que el Pacto previamente ratificado de Dios para con el Cristo, la ley que fue hecha cuatrocientos treinta años después, no lo abroga, para invalidar la promesa.
Bueno es ser celosos en bien siempre; y no solamente cuando estoy presente con vosotros.
querría cierto estar ahora con vosotros, y mudar mi voz; porque estoy avergonzado de vosotros.
Porque Agar o Sinaí es un monte de Arabia, el cual corresponde a la que ahora es Jerusalén, la cual junto con sus hijos está en esclavitud.
Mas ¿qué dice la Escritura? Echa fuera a la sierva y a su hijo; porque no será heredero el hijo de la sierva con el hijo de la libre.
Porque los que son del Cristo, han colgado en el madero a la carne con sus afectos y concupiscencias.
Hermanos, si alguno fuere tomado en alguna falta, vosotros que sois espirituales, restaurad al tal con el espíritu de mansedumbre; considerándote a ti mismo, para que tú no seas también tentado.
Hermanos, la gracia del Señor nuestro, Jesús el Cristo, sea con vuestro espíritu. Amén.