'Desierta' en la Biblia
No los echaré de delante de ti en un año, para que no quede la tierra desierta, y se aumenten contra ti las bestias del campo.
Que la tierra estará desamparada de ellos, y reposará sus sábados, estando desierta a causa de ellos; y ellos rogarán por su iniquidad; por cuanto menospreciaron mis derechos, y tuvo el alma de ellos fastidio de mis decretos.
Y dije al rey: El rey viva para siempre. ¿Cómo no estará triste mi rostro, cuando la ciudad, casa de los sepulcros de mis padres, está desierta, y sus puertas consumidas del fuego?
Y les dije: Vosotros veis el mal en que estamos, que Jerusalén está desierta, y sus puertas consumidas del fuego; venid, y edifiquemos el muro de Jerusalén, y no seamos más en oprobio.
para saciar la tierra desierta e inculta, y para hacer producir de verdura renuevos?
Vuelve el desierto en estanques de aguas, y la tierra desierta en manaderos de agua.
haré que quede desierta; no será podada ni cavada; y crecerán el cardo y las espinas; y aun a las nubes mandaré que no derramen lluvia sobre ella.
Porque tus asolamientos, y tus destrucciones, y tu tierra desierta, ahora será angosta por la multitud de los moradores; y tus destruidores serán apartados lejos.
Y no dijeron: ¿Dónde está el SEÑOR, el que nos hizo subir de tierra de Egipto, el que nos hizo andar por el desierto, por una tierra desierta y despoblada, por una tierra seca y de sombra de muerte, por una tierra por la cual no pasó varón, ni allí habitó hombre?
Castiga Jerusalén, para que por ventura no sea descoyuntado mi alma de ti, para que por ventura no te torne desierta, tierra no habitada.
¿Hasta cuándo estará desierta la tierra, y marchita la hierba de todo el campo por la maldad de los que en ella moran? Faltaron los ganados, y las aves; porque dijeron: No verá él nuestras postrimerías.
Mas si no oyereis estas palabras, por mí juré, dijo el SEÑOR, que esta Casa será desierta.
Porque la tierra está llena de adúlteros; porque a causa del juramento la tierra está desierta; las cabañas del desierto se secaron; la carrera de ellos fue mala, y su fortaleza no derecha.
No los oigáis; servid al rey de Babilonia, y vivid: ¿por qué ha de ser desierta esta ciudad?
Y poseerán heredad en esta tierra de la cual vosotros decís: Está desierta, sin hombres y sin animales; es entregada en manos de los caldeos.
Sus ciudades fueron asoladas, la tierra seca y desierta, tierra que no morará en ella nadie, ni pasará por ella hijo de hombre.
Y las ciudades habitadas serán asoladas, y la tierra será desierta; y sabréis que yo soy el SEÑOR.
Hijo de hombre, por cuanto dijo Tiro sobre Jerusalén: Ea, bien; quebrantado es el puerto de los pueblos; a mí se volvió; seré llena; y ella desierta;
Y la tierra de Egipto será asolada y desierta; y sabrán que yo soy el SEÑOR, porque dijo: Mi río, y yo lo hice.
Y haré alejar de vosotros al del aquilón, y lo echaré en la tierra seca y desierta; su faz será hacia el mar oriental, y su fin al mar occidental; y exhalará su hedor; y subirá su pudrición, porque se engrandeció.
¿Tenéis vosotros tiempo, vosotros, de morar en vuestras casas enmaderadas, y esta Casa está desierta?
Buscáis mucho, y halláis poco; y cuando encerráis en casa, yo lo soplaré. ¿Por qué? Dijo el SEÑOR de los ejércitos. Por cuanto mi Casa está desierta, y cada uno de vosotros corre a su propia casa.
He aquí vuestra Casa os es dejada desierta.
He aquí, os es dejada vuestra Casa desierta; y os digo que no me veréis hasta que venga tiempo cuando digáis: Bendito el que viene en nombre del Señor.
Porque está escrito en el libro de los Salmos: Sea hecha desierta su habitación, y no haya quien more en ella; y: Tome otro su oficio.