'Después' en la Biblia
No hay memoria de lo que precedió, ni tampoco de lo que sucederá habrá memoria en los que serán después.
Después torné yo a mirar para ver la sabiduría y los desvaríos y la necedad; porque ¿qué podrá hacer el hombre que venga después del rey, sino lo que ya ha sido hecho?
Asimismo aborrecí todo mi trabajo que había puesto por obra debajo del sol; el cual tendré que dejar a otro que vendrá después de mí.
Así que he visto que no hay cosa mejor que alegrarse el hombre con lo que hiciere; porque ésta es su parte; porque ¿quién lo llevará para que vea lo que ha de ser después de él?
No tenía fin la muchedumbre de pueblo que fue antes de ellos; aun los que vendrán después tampoco estarán contentos con él. Y esto es también vanidad y aflicción de espíritu.
Porque ¿quién sabe cuál es el bien del hombre en la vida, todos los días de la vida de su vanidad, los cuales él pasa como sombra? Porque ¿quién enseñará al hombre qué será después de él debajo del sol?
En el día del bien goza del bien; y en el día del mal considera. Dios también hizo esto delante de lo otro, para que el hombre no descubra nada después de él.
Este mal hay entre todo lo que se hace debajo del sol, que todos tengan un mismo suceso, y también que el corazón de los hijos de los hombres esté lleno de mal y de enloquecimiento en su corazón durante su vida; y después, se van a los muertos.
El necio multiplica las palabras; el hombre no sabe lo que ha de ser; ¿y quién le hará saber lo que después de él será?
Echa tu pan sobre las aguas; que después de muchos días lo hallarás.