'Solos' en la Biblia
Y en aquel tiempo, cuando Jeroboam salía de Jerusalén, el profeta Ahías el Silonita lo encontró en el camino. Ahías se había puesto un manto nuevo y los dos estaban solos en el campo.
A ellos solos se les dio la tierra, Y ningún extranjero pasó entre ellos.
¡Ay de los que juntan casa con casa, {Y} añaden campo a campo Hasta que no queda sitio alguno, Para así habitar ustedes solos en medio de la tierra!
¿Hay entre los ídolos (las vanidades) de las naciones alguien que haga llover? ¿O pueden los cielos {solos} dar lluvia? ¿No eres Tú, oh SEÑOR, nuestro Dios? En Ti, pues, esperamos, Porque Tú has hecho todas estas cosas.
Seis días después, Jesús tomó con El a Pedro, a Jacobo (Santiago) y a Juan, y los llevó a ellos solos a un monte alto; y se transfiguró delante de ellos.
Al día siguiente, la multitud que había quedado al otro lado del mar se dio cuenta de que allí no había más que una barca, y que Jesús no había entrado en ella con Sus discípulos, sino que Sus discípulos se habían ido solos.
Por lo cual, no pudiendo soportar{lo} más, pensamos que era mejor quedarnos solos en Atenas.