'Uvas' en la Biblia
y en la vid tres sarmientos; y ella como que florecía, salía su renuevo, maduraron sus racimos de uvas;
y que el vaso de Faraón estaba en mi mano, y que yo tomaba las uvas, y las exprimía en el vaso del Faraón, y daba el vaso en la mano del Faraón.
Atando a la vid su pollino, y a la cepa el hijo de su asna, lavó en el vino su vestido, y en la sangre de uvas su cobertura:
Lo que de suyo naciere en tu tierra segada, no lo segarás; y las uvas de tu vid consagrada no encerrarás; año de reposo será a la tierra.
se abstendrá de vino y de sidra; vinagre de vino, ni vinagre de sidra no beberá, ni beberá algún licor de uvas, ni tampoco comerá uvas frescas ni secas.
y cuál sea la tierra, si es fértil o estéril, si en ella hay árboles o no; y esforzaos, y recoged del fruto de la tierra. Y el tiempo era el tiempo de las primeras uvas.
Y llegaron hasta el arroyo de Escol, y de allí cortaron un sarmiento con un racimo de uvas, el cual trajeron dos en una vara, y de las granadas y de los higos.
Cuando entrares en la viña de tu prójimo, comerás uvas hasta saciar tu deseo; mas no pondrás en tu vaso.
Plantarás viñas y labrarás, mas no beberás vino, ni cogerás uvas; porque el gusano las comerá.
Por tanto de la vid de Sodoma es la vid de ellos, y de los campos de Gomorra; las uvas de ellos son uvas ponzoñosas, racimos muy amargos tienen.
Entonces Abigail tomó luego doscientos panes, y dos cueros de vino, y cinco ovejas guisadas, y cinco medidas de harina tostada, y cien hilos de uvas pasas, y doscientos panes de higos secos, y lo cargó en asnos;
Y salió uno al campo a coger hierbas, y halló una parra montés, y cogió de ella una faldada de uvas silvestres; y volvió, y las cortó en la olla del potaje; porque no sabían lo que era.
En aquellos días vi en Judá algunos que pisaban en lagares en sábado, y que acarreaban manojos, y cargaban los asnos con vino, y también de uvas, de higos, y de toda carga, y traían a Jerusalén en día de sábado; y les protesté el día que vendían el mantenimiento.
La había cercado, y despedregado, y plantado de vides escogidas; había edificado en medio de ella una torre, y también asentado un lagar en ella; y esperaba que diera uvas, y dio uvas silvestres.
¿Qué más se había de hacer a mi viña, que yo no hice en ella? ¿Cómo, esperando yo que diera uvas, ha dado uvas silvestres?
Los cortaré del todo, dijo el SEÑOR. No hay uvas en la vid, ni higos en la higuera, y se caerá la hoja; y lo que les he dado pasará de ellos.
En aquellos días no dirán más: Los padres comieron las uvas agrias, y los dientes de los hijos tienen la dentera.
Sino que cada cual morirá por su iniquidad; los dientes de todo hombre que comiere las uvas agrias, tendrán la dentera.
Como uvas en el desierto hallé a Israel; como los primeros frutos de la higuera en su principio vi a vuestros padres. Ellos entraron a Baal-peor, y se apartaron para vergüenza, y se hicieron abominables como aquello que amaron.
He aquí vienen días, dice el SEÑOR, en que el que ara alcanzará al segador, y el pisador de las uvas al que lleve la simiente; y los montes destilarán mosto, y todos los collados se derretirán.
Por sus frutos los conoceréis. ¿Se cogen uvas de los espinos, o higos de los abrojos?
Porque cada árbol por su fruto es conocido; que no cogen higos de los espinos, ni vendimian uvas de las zarzas.
Y otro ángel salió del altar, el cual tenía poder sobre el fuego, y clamó con gran voz al que tenía la hoz aguda, diciendo: Mete tu hoz aguda, y vendimia los racimos de la tierra; porque están maduras sus uvas.