'Vayas' en la Biblia
Y he aquí, yo estoy contigo, y te guardaré por dondequiera que vayas, y te volveré a esta tierra; porque no te dejaré hasta tanto que haya hecho lo que te he dicho.
Entonces dijo Dios a Balaam: No vayas con ellos, ni maldigas al pueblo; porque es bendito.
Y me dijo Jehová: Levántate, anda, para que vayas delante del pueblo, para que entren y posean la tierra que juré a sus padres que les había de dar.
Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo dondequiera que vayas.
Te ruego que no te vayas de aquí, hasta que a ti vuelva, y saque mi presente, y lo ponga delante de ti. Y Él respondió: Yo esperaré hasta que vuelvas.
Y su padre y su madre le dijeron: ¿No hay mujer entre las hijas de tus hermanos, ni en todo mi pueblo, para que vayas tú a tomar esposa de los filisteos incircuncisos? Y Sansón respondió a su padre: Tómala para mí, porque ésta agradó a mis ojos.
Y Ruth respondió: No me ruegues que te deje, y que me aparte de ti; porque a dondequiera que tú vayas, iré yo; y dondequiera que vivas, viviré. Tu pueblo será mi pueblo, y tu Dios será mi Dios.
Entonces Boaz dijo a Ruth: Oye, hija mía, no vayas a espigar a otro campo, ni pases de aquí; y aquí estarás junto a mis criadas.
Y dijo: Estas seis medidas de cebada me dio, diciéndome: Para que no vayas a tu suegra con las manos vacías.
Aconsejo, pues, que todo Israel se junte a ti, desde Dan hasta Beerseba, en multitud como la arena que está a la orilla del mar, y que tú en persona vayas a la batalla.
Te ruego que vayas ahora corriendo a recibirla, y dile: ¿Te va bien a ti? ¿Le va bien a tu marido, y a tu hijo? Y ella respondió: Bien.
No entres en la senda de los impíos, ni vayas por el camino de los malos.
Porque así dice Jehová: No entres en casa de luto, ni vayas a lamentar, ni los consueles: porque yo he quitado mi paz de este pueblo, dice Jehová, mi misericordia y piedades.
¿Y tú buscas para ti grandes cosas? No las busques; porque he aquí que yo traigo mal sobre toda carne, dice Jehová, y a ti te daré tu vida por despojo en todos los lugares adonde vayas.
Y cierto escriba vino y le dijo: Maestro, te seguiré adondequiera que vayas.
Y aconteció que yendo ellos, uno le dijo en el camino: Señor, te seguiré a dondequiera que vayas.
Cuando vayas al magistrado con tu adversario, procura en el camino librarte de él; para que no te arrastre al juez, y el juez te entregue al alguacil, y el alguacil te meta en la cárcel.