'Afán' en la Biblia
Así que, no os congojéis por el día de mañana; que el día de mañana traerá su fatiga: basta al día su afán.
Y el que fué sembrado en espinas, éste es el que oye la palabra; pero el afán de este siglo y el engaño de las riquezas, ahogan la palabra, y hácese infructuosa.
¿Y quién de vosotros podrá con su afán añadir a su estatura un codo?
Quisiera, pues, que estuvieseis sin afán. El soltero tiene cuidado de las cosas que son del Señor, de cómo ha de agradar al Señor;
ni comimos de balde el pan de ninguno; sino que trabajamos con afán y fatiga día y noche, para no ser carga a ninguno de vosotros;
antes bien, cuando estuvo en Roma, me buscó con afán y me halló;